ESNOTICIA
La hostelería, aliviada, pero teme el cierre de casi 500 establecimientos
Satisfacción en los bares y restaurantes que no tienen terraza || La Federación pide seis millones de euros para ayudar a un sector “que ha quedado muy tocado”
La reapertura del interior de los 1.200 establecimientos del sector de la hostelería en Lleida y otros seis municipios del Baix Segre, a pesar de que sea con un aforo del 50%, ha aliviado a un sector muy tocado en Ponent por la pandemia. Su situación se había agravado ante la pérdida de clientes en las terrazas en días de intenso calor.
El presidente de la Federación de Hostelería, Josep Castellarnau, valoró positivamente la decisión y apuntó que “muchos locales podrán abrir ahora”, ya que los que no disponen de terraza no habían podido hacerlo. “Mentalmente ya necesitábamos trabajar, porque sino la gente se habría hundido física y mentalmente”, dijo. Asimismo, señaló que están a la espera de que la evolución de la pandemia mejore para poder relajar las restricciones de aforo.
Algunos clientes pidieron ayer hacer un “esfuerzo” e ir a consumir a los bares y restaurantes
Por su parte, el secretario general de esta entidad, Ramon Solsona, dijo que “nunca entendimos la medida por la que se nos prohibía abrir y tampoco se nos ha explicado el por qué se tuvo que aplicar y por qué no se tomaron las mismas restricciones que en Barcelona”. Aun así, señaló que “la prioridad” era abrir el interior de los establecimientos, “pero ahora toca paliar los daños económicos que hemos sufrido en estas semanas” y recordó que los 4 millones de euros en ayudas prometidas por el Govern es para todos los sectores “y no solo el nuestro”. Al respecto, dijo que los establecimientos de Lleida y los seis municipios facturaban 1,7 millones diarios, “pero ahora esta cifra se ha reducido a algo marginal y a los que tenían terraza”.
Según Solsona, el sector necesita 6 millones de euros para cubrir sueldos, alquileres y créditos. “Hemos calculado que el 40% de los 1.200 bares y restaurantes de estos siete municipios, unos 480, seguramente no podrán reabrir”, lamentó.
Por otro lado, empleados de estos locales de la ciudad de Lleida celebraron la medida, “aunque llega tarde”, sobre todo porque muchas personas podrán volver a trabajar y se reactivará parte de la economía, mientras que algunos clientes incentivaron a los leridanos a “hacer un esfuerzo” e ir a consumir en sus locales.