Fiscalía acusa a dos hermanos de estafa en las obras de un geriátrico

La Audiencia de Lleida acogió ayer un juicio contra dos hermanos acusados de estafar más de 300.000 euros por no pagar las obras de una residencia para la tercera edad en Torrefarrera. La Fiscalía solicitó una pena de prisión de cinco años para cada uno, mientras que la acusación particular solicitó una condena de seis años. Los acusados declararon que su intención era pagar pero que “fueron víctimas de la crisis bancaria y económica”. Las obras finalizaron entre 2009 y 2010 y según los acusados hicieron “todo lo posible” pero que el banco se negó a liberar un fondo de inversión que tenían con 500.000 euros para poder afrontar las facturas impagadas, que superaban los 300.000 euros a cuatro empresas. Además, señalaron que cuando la residencia empezó a funcionar no podían cubrir las plazas “porque la Generalitat no pagaba” y el proyecto fue inviable. Por ello, declararon, han perdido todo su patrimonio.

Sin embargo, la acusación particular, que ejercen las empresas perjudicadas representadas por el abogado Ignacio Sáenz de Buruaga, señaló que “sabían que no podían pagar y engañaron a las víctimas” creando un entramado empresarial. Asimismo, señaló que crearon otra sociedad “para sacar los beneficios de la residencia”. Los perjudicados declararon que tuvieron problemas de solvencia a causa de estos impagos, teniendo que rehipotecar viviendas y patrimonio. Las acusaciones mantuvieron sus peticiones de condena al acabar el juicio, que duró más de siete horas, con la declaración de dos acusados, cuatro demandantes, cuatro testigos y dos peritos.