Solo 16 reclusos de Ponent y el Centre Obert han tenido Covid y no hay ningún caso activo

Solo 16 reclusos del Centre Penitenciari Ponent y el Centre Obert de Lleida, con 14 y dos casos respectivamente, han tenido Covid-19 en lo que llevamos de pandemia, según los datos de Justicia a 8 de octubre. Esta cifra representa el 2,26% de la población reclusa de los dos centros, un total de 707 personas en la misma fecha, 621 en Ponent y 86 en el Centre Obert. Ninguno de estos casos estaba activo el pasado jueves, según informaron desde la consellería, que atribuya estas cifras bajas a la aplicación de medidas drásticas como la suspensión durante meses de las visitas, especialmente los vis a vis, o las salidas programadas. Un ‘blindaje’ para evitar brotes en el interior de las penitenciarías.

En las cárceles catalanas han dado positivo 185 personas de las 7.900 que están privadas de libertad. Otras medidas para evitar contagios son las pruebas PCR que desde principios de septiembre se hacen a todos los internos de segundo grado que disfruten de permisos. Esta medida pretende reducir el tiempo que están en confinamiento en la vuelta del permiso, después de salir a la calle. Hasta entonces, cuando reingresaban a prisión debían estar aislados diez días en sus celdas. Ahora estos reclusos se someten al test dos días después de haber regresado el centro. Si el resultado es negativo, se reincorpora a su módulo y, si ha dado positivo, ingresa en una dependencia sanitaria para continuar el aislamiento.

Desde septiembre se hace PCR a los internos que regresan de permiso para reducir el aislamiento

A finales de septiembre se retomaron las visitas con los familiares e hijos y los encuentros íntimos

Por otra parte, en Lleida un total de 27 funcionarios han dado positivo y el pasado jueves tampoco había casos activos. El sindicato Csif espera que, en el supuesto de que hubiera algún rebrote, “se puedan ajustar los horarios de los funcionarios para poder hacer grupos cerrados y minimizar el riesgo de contagio”. También aseguran que ya no cuentan con las diez personas que se contrataron de refuerzo. El sindicato ha solicitado que se administre la vacuna de la gripe al personal que lo desee en los propios centros para evitar los riesgos de contagio.

Las videollamadas, claves para mantener el contacto con el exterior

Justicia apostó por las videollamadas, que nacieron como alternativa a las comunicaciones presenciales durante el confinamiento para evitar que los reclusos perdieran el contacto con sus allegados. Se empezaron a aplicar el 24 de marzo para compensar la suspensión de los vis a vis y de las visitas por locutorio de vidrio, que impedía el acceso de las personas externas a la cárcel. Durante estos seis meses se han hecho unas 70.000 videollamadas (68.042) y se han beneficiado más 9.454 internos que han pasado por la cárcel. A diario, en todas las cárceles se llevan a cabo una media de 500 conexiones. La mayor parte de estas comunicaciones, 63.487, se han hecho con móviles. Tiene lugar siempre bajo la supervisión de los profesionales y son vía Whatsapp, que es el sistema más popular y del que disponen la mayor parte de las familias.