ESNOTICIA
La hostelería teme que el 40% de bares y restaurantes de Lleida acaben cerrando
El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya avaló ayer todas las nuevas restricciones decretadas por la Generalitat, después de que ya hubiera entrado en vigor el cierre de bares y restaurantes durante 15 días. Una medida que, según la Federación de Hostelería, podría provocar que hasta el 40% de los establecimientos de Lleida ya no reabran.
Un 40% de los bares y restaurantes de la provincia podrían bajar la persiana de forma definitiva tras entrar en vigor ayer el decreto de la Generalitat que ordena el cierre de estos establecimientos durante 15 días. Así lo aseguró el secretario general de la Federación de Hostelería de Lleida, Ramon Solsona, lo que supondría el cierre de 1.080 establecimientos leridanos. Advirtió de que “cuanto más duren las restricciones, más se elevará el porcentaje de bares y restaurantes cerrados”. Añadió que esta cifra “es 10 puntos más elevada que la media estatal, que ronda el 30%”. Solsona no dudó en afirmar que esta medida del Govern “es una barbaridad”, además de ser injusta, y recordó que los brotes de coronavirus en el sector hostelero han sido “mínimos”.
Por otro lado, remarcó las dudas de los hosteleros sobre qué deben hacer ahora con sus empleados y si es viable volver a aplicarles un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). “Estamos esperando que el departamento de Trabajo nos diga qué opción es mejor, pero ya nos han llegado casos de hosteleros que no van a hacer nada y van a seguir pagando a sus trabajadores como hasta ahora, ya que si aplican un ERTE no pueden hacer despidos o cerrar el negocio”.
Paralelamente, el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) avaló ayer todas las medidas del Govern para intentar atajar contagios que en principio podrían colisionar con derechos fundamentales: limitar las reuniones a un máximo de seis personas, suspender las clases presenciales en las universidades y limitar el aforo en los espacios de culto al 50%. De este modo, estas restricciones se suman al resto vigentes desde ayer, entre ellas el cierre de bares y restaurantes y la limitación al 30% del aforo en comercios. No obstante, la Federación Catalana de Asociaciones de Actividades de Restauración y Musicales (Fecasarm) presentó ayer un recurso contencioso-administrativo ante el TSJC contra el cierre de la hostelería al considerar que hay defectos de forma y que “vulnera el derecho fundamental a la libre circulación”.