ESNOTICIA
Los hoteles de la capital mantienen la clientela pese a las restricciones
La ocupación media ronda el 50%, una situación “mejor de lo esperado”, reconocen, aunque algunos están cerrados || La mayoría de usuarios vienen por trabajo
Los dos confinamientos y las restricciones que ha sufrido Lleida desde marzo debido a la pandemia del coronavirus han afectado de lleno a la actividad hotelera. Entre sus clientes abundaban los participantes en congresos y ferias, y casi todos han sido suspendidos, por lo que algunos hoteles han cerrado a la espera de que se levanten las restricciones, como el Real, que solo da alojamiento en sus apartamentos. No obstante, los que sí han permanecido abiertos reconocen que la situación es “mejor de la esperada” y, con una ocupación media del 50%, se nutren de clientes que vienen por trabajo, hacen un alto a medio camino de su destino o incluso vienen de turismo. Así lo aseguró un portavoz del hotel Zenit, que dijo que “en el último mes hemos estado completos 4 días, ahora estamos al 50% y la mayoría de los huéspedes vienen por negocios”. Admite que “tras el cierre de bares y restaurantes [el viernes] ha habido varias cancelaciones, pero esperábamos que fuera peor”, mientras que a nivel laboral “los trabajadores nos hemos tenido que dividir por turnos, pero es mejor que estar en un ERTEo despedido”. Una opinión que comparten trabajadores del hotel NH Pirineos, que abrió sus puertas el 3 de septiembre y que aseguran que “está yendo mejor de lo esperado”. Admiten que “sí que es cierto que hemos tenido anulaciones de clientes que venían a hacer turismo, pero los viajes laborales se han mantenido. La verdad es que nos hemos sorprendido hasta nosotros, pero intuimos que en las próximas semanas la actividad irá a la baja por las restricciones que entraron en vigor el jueves”, concluye una empleada del NH. Por su parte, el gerente del hotel Nadal, Josep Nadal, ve las cosas más negras, ya que “la semana pasada teníamos una ocupación de entre el 50% y el 70% y ahora estamos entre el 30% y el 50%”. Una situación que ha comportado que parte de su plantilla esté en ERTE, algo que “afecta a la calidad del servicio, pero es la única solución viable”, ya que no han podido acogerse a ninguna ayuda. En el otro extremo está el hotel Ibis, al que apenas le han afectado las restricciones. “La mayoría de los clientes que tenemos los días laborales vienen por asuntos de trabajo y ahora estamos al 50%, así que por ahora estamos bien, aunque es cierto que el fin de semana la clientela se reduce”, dijo la secretaria del hotel.