ECONOMÍA
Las restricciones por la Covid-19 dejan menos compradores en el mercadillo de Pardinyes pero los paradistas celebran poder vender
Los vendedores temían que se volviera a suspender la venta de alimentos frescos al aire libre por las nuevas medidas
Las nuevas restricciones de movilidad el fin de semana han hecho que la afluencia de compradores esta mañana en el mercadillo de Pardinyes, en Lleida ciudad, haya sido menor.
Los paradistas, sin embargo, celebran que el mercadillo se mantenga abierto y que no se haya optado por suspenderlo, como ya pasó el pasado mes de marzo.
Incluso, la consellera de Agricultura, Teresa Jordà, ha pedido a los alcaldes del país que mantengan estos espacios de venta de alimentos frescos, ya que son una "necesidad" para no romper la cadena alimenticia. Pel contrario, Torrefarrera ha decidido suspender el de los domingos.
Los paradistas, en especial los que se dedican en venta de productos frescos, coinciden con Jordà al pedir a los municipios que mantengan los mercados semanales abiertos a pesar de las nuevas restricciones decretadas por el Gobierno.
De hecho, ven como un "agravio comparativo" que las grandes cadenas de supermercados hayan funcionado con normalidad durante toda la pandemia mientras algunos mercados han sido suspendidos.
Además, el paradista Josep Segura explica que es "mucho mejor" comprar en el mercado ya que considera las medidas de seguridad se respetan más, y Maria Carme Camins defiende que hay muchas familias de 'pagès' que dependen de manera directa de estas ventas y añade que no se trata de un "lujo" sino de un sector esencial. "Es nuestra forma de ganarnos la vida", remarca el paradista Andreu Aragonés.