Los centros educativos ven más eficaces para los alumnos las clases presenciales

Responsables de centros educativos de Lleida defienden la mayor eficacia de las clases presenciales para los alumnos, frente a las telemáticas, y destacan también los beneficios pedagógicos de la socialización de los escolares. Los institutos, por su parte, reclaman instrucciones “claras” sobre el modelo híbrido en Bachillerato y FP.

“La diferencia entre la enseñanza presencial y la online es como el día y la noche, no tiene nada que ver”. Así de contundente se muestra la directora de una escuela de Primaria pública de Lleida a la hora de defender la necesidad de que las clases sigan siendo presenciales, a menos que se decrete un confinamiento domiciliario general. “En la escuela los niños se socializan, escuchan al maestro e interactúan con sus compañeros”, destaca. Su centro tiene un grupo de quinto de Primaria confinado. “Se fueron a casa con un programa de trabajo y hoy su profesor se conectará con ellos vía online para atenderlos y resolver dudas, pero veremos cuántos pueden conectarse en casa, y eso que estos son de los mayores”, señala. Igual de claro se expresa el director de un instituto. “Lo ideal es la presencialidad, pero por ahora hemos de aplicar un sistema de docencia híbrido

, pero no podemos replicar las clases presenciales a través de una pantalla”, sino que se han de adaptar, afirma.

Para frenar el avance de la pandemia la Generalitat ordenó primero a finales de la semana pasada que todas las class fueran telemáticas en Bachillerato y FP, aunque acto seguido Educación rectificó y dijo que al menos el 50% deben ser presenciales. Estas órdenes contradictorias provocaron confusión y los centros reclaman “instrucciones claras, sencillas y unificadas”.

Además, la provincia tiene 142 aulas cerradas por algún positivo de Covid-19 y 3.527 alumnos y docentes en cuarentena. El Segrià concentra 77 grupos y 1.778 personas, pero hay clases cerradas en todas las comarcas excepto en la Alta Ribagorça, por lo que muchos centros deben usar la docencia online para los escolares en cuarentena.

La directora de otro instituto subraya que “se aprovechan mucho más las clases presenciales”, opinión que comparte otro director, que ve importante “la interacción presencial de un profesor, el trabajo cooperativo de los alumnos, las miradas y el contacto. “Pierdes mucho con la docencia telemática”, recalca. Otra directora apunta que con la docencia virtual “hay que adaptar la manera cómo se afronta la clase y cómo se plantea el trabajo del alumnado, cuesta 

más mantener la atención y la participación”. Asimismo, la directora de un colegio concertado incide en la necesidad de “conseguir que, independientemente de la metodología o el lugar, los resultados respondan a los objetivos propuestos” mientras la de otro ve más seguro que los escolares vayan a clase con su grupo en lugar de quedarse en casa, porque los mayores seguramente saldrían por la tarde a ver a los amigos sin ningún control. Por su parte, la presidenta de la Fapac, Belén Tascón, reiteró que su entidad siempre ha defendido la opción presencial, porque la telemática no garantiza una atención educativa a la diversidad de alumnos, como por ejemplo los que tienen necesidades especiales o son de familias con pocos recursos, que no tienen conexión a a la red o viven en condiciones que hacen sumamente difícil el aprendizaje en casa. Eso sí, se queja de que “el departamento no está aplicando las suficientes medidas de prevención en los centros, no ha reducido ratios ni ha reforzado el profesorado ni ha ampliado los espacios disponibles”. “El sistema educativo afronta la pandemia con los mismos recursos que siempre”, concluye. Por su parte, Educación afirmó ayer que trabaja para que los 300.000 ordenadores prometidos para tercero y cuarto de ESO, Bachillerato y FP lleguen “lo antes posible”. El conseller Josep Bargalló dijo que hoy empiezan a distribuir conexión mifi para hasta 15.000 alumnos de Bachillerato y FP. También anunció mascarillas transparentes para personas sordas.

«Ha sido de locos, el mejor sitio para aprender es el colegio»

Familia Valerio Espinosa. La Seu d’Urgell

La familia Valerio Espinosa ha pasado “un mes de octubre intenso”, tal y como lo describe la madre, Montse. Tienen 8 hijos y seis y los dos padres han pasado el coronavirus. Empezó la madre y el mayor de los hijos y poco a poco se fueron infectando el marido, Hugo, y 6 de los 8 niños. Ayer permanecían aún confinados dos. Ha sido conexiones online y trabajos en casa. Montse reconoce que “ha sido de locos porque por mucho que te esfuerces en tener unas rutinas estables, los deberes en casa cuestan mucho más, el mejor lugar para aprender es el colegio”. Los pequeños se han ido a la cama más tarde y se han levantado también más tarde.

«Al principio, los horarios se nos descuadraron»

Familia Moreno Lino. Lleida

Mauricio, Elisabeth y sus dos hijas, Elisabeth y Noa han dado positivo, están confinados desde el 23 de octubre. Viven en l’Horta, así que pueden salir de casa dentro de su finca, por lo que se les hacen llevadero. Reconoce que el principio “se nos descuadraron los horarios, nos acostábamos y nos levantábamos tarde, pero ya lo hemos normalizado”. La hija mayor, de 11 años se conecta para hacer las tareas online que le manda la escuela y también está pendiente de su hermana de 3 años. 

«Los padres tenemos que hacer de profesores»

Amparo López. La Morana

De los 19 habitantes de La Morana (Torrefeta i Florejacs), los 5 miembros de la familia de Amparo López están confinados. La hija mayor dio positivo y los padres han tenido que coger la baja laboral. Explica que “la situación es agotadora para los más pequeños, es difícil sacarlos del aburrimiento”. En contacto con la escuela, los padres tienen que hacer de profesores para que hagan el trabajo de clase. Las tardes las dedican a ver la tele y a jugar, pero “lo que más les cuesta es no salir de casa”.