Rezo islámico con unas 350 personas en el Palau de Vidre

La comunidad musulmana que reza en el Palau de Vidre controló ayer el aforo, a diferencia del viernes anterior, y solo permitió el acceso del fieles hasta llegar al 30% de su capacidad, como marcan las restricciones de la Generalitat para los centros de culto para frenar el avance del coronavirus. Asimismo, en el interior del pabellón se situaron en filas y más separados de lo habitual.

El portavoz del colectivo Abdellatif Láatabi, indicó que una vez que hubo unas 350 personas en el interior del Palau de Vidre al resto de fieles que fueron llegando ya no se les permitió entrar en el pabellón. “Les hemos ido diciendo que volvieran a sus casas”, detalló. Asimismo, debido al gran número de personas que se quedaron fuera, más de los que pudieron rezar en el equipamiento según la comunidad islámica, están estudiando establecer dos turnos para la oración el próximo viernes.

Agentes de la Guardia Urbana supervisaron que esta vez se cumpliera la normativa, después de que el viernes pasado el rezo fuera multitudinario. Entonces, el colectivo argumentó que creían que las limitaciones de aforo entraban en vigor durante la noche de viernes al sábado, no el viernes a primera hora de la mañana.