Altas peticiones de penas por una protesta independentista en Lleida porque iban con el rostro cubierto
"Cubrieron sus rostros y sus cabezas con capuchas y tapabocas para dificultar la identificación posterior de sus acciones aprovechándose todos los acusados de cometer con mayor facilidad su propósito”. Esto es lo que afirma Fiscalía en su escrito de acusación contra 11 acusados de causar altercados durante protesta en la subdelegación del Gobierno en Lleida contra la detención del expresidente Carles Puigdemont en Alemania en marzo de 2018, para los que hace peticiones de condenas de cinco años y tres meses de prisión, como publicó SEGRE ayer.
Uno de los acusados es el rapero Pablo Hasél, para el que piden cinco años y nueve meses de prisión porque es reincidente en el delito de atentado a la autoridad. El ministerio público pide concretamente que se les impongan 3 años de prisión por el delito de desórdenes públicos, un año y medio por atentado a la autoridad y nueve meses de prisión más por lesiones. Cuatro agentes de los Mossos d’Esquadra resultaron heridos en una concentración en la que participaron unas 3.000 personas. El juicio podría celebrarse en el primer trimestre del próximo año.