Primeras multas en las calles 30 en Lleida, que solo se imponen a los que superan los 50 km/hora

La Guardia Urbana empezó ayer a multar por exceso de velocidad en las calles cuyo límite se ha reducido a 30 kilómetros por hora, un mes después de la entrada en vigor de esta medida, pero sólo sancionará de momento a los conductores que vayan a más de 50 por hora y advertirá a los que vayan a entre 30 y 50. La Policía Local controló varias calles con el coche radar y ayer por la mañana impuso una decena de multas. El 87% de las vías de la ciudad tienen la velocidad limitada a un máximo de 30 por hora y solo hay 25 que son zona 50, todas con doble carril por sentido.

“La función desde el punto de vista policial no es denunciar por denunciar, sino que esta medida sirva para reducir la siniestralidad”, recalcó el subinspector de la división de tráfico de la Guardia Urbana, Antoni Salvador. Es por ello que dijo que, por ahora, “ponemos los márgenes de velocidad para denunciar muy elevados a pesar de que por ley podríamos hacerlo a partir de los 31 km/hora”. Detalló que, en una calle 30, “si se va entre 31 y 50 por hora se parará al conductor para informarle de la nueva normativa; si va entre 51 y 60 se le impondrá una multa de 100 euros y la retirada de 2 puntos del carnet; si circula entre 61 y 70 la sanción será de 200 euros y 3 puntos. Cada 10 kilómetros se incrementará la sanción en 100 euros y un punto”, detalló el subinspector de tráfico, que aseguró que no se multará a a entre 30 y 50 por hora “a no ser que se decida rebajar el margen de tolerancia”.

La sanción será a partir de los 51 por hora y su coste aumentará 100€ y un punto cada diez kilómetros más

Respecto a cómo ha ido el “período de prueba” de la ciudad 30, Salvador dijo que “no hemos tenido que parar a muchos vehículos y, si lo hacíamos era para informarles de la nueva normativa, además Lleida no da mucho de sí para correr a no ser que sea en horario nocturno”. Por otro lado, la nueva ordenanza de circulación también permite que los patinetes eléctricos puedan circular por la calzada en las calles 30 en lugar de la acera, una medida que según Salvador se ha cumplido a medias. “Ha habido algunos que iban por la calzada y otros no, pero el margen de cumplimiento se puede mejorar, porque el objetivo es erradicar la presencia de estos vehículos en la acera y que sea solo para los peatones”.

Por su parte, el concejal de Movilidad, Joan Ramon Castro, recalcó que con la ciudad 30 “no hay afán recaudatorio, sino hacer pedagogía” y no descarta incluir bandas rugosas u otros elementos para reducir la velocidad de las calles.

La Paeria aún no ha adaptado todas las señales a la nueva normativa

La Paeria colocar la nueva señalización de la ciudad 30 durante el mes de noviembre. Una labor que según el edil de Movilidad se ha llevado a cabo “en los 20 puntos de entrada a Lleida y en casi todas las calles cuya velocidad es de 50, no en las de 30 porque ya está puesta en la entrada”. No obstante, todavía quedan señales como la de la imagen, en la calle Bisbe Galindo, que fijan el final de la zona 30 cuando en realidad no es así, ya que da a una calle que también es 30. En otro orden Castro dijo que ya se ha arreglado el radar de Prat de la Riba que el martes fotografiaba a todos los vehículos que pasaban.