SALUD QUEJA
Denuncia que el ICAM le ha dado el alta pese a que no puede trabajar
Un vecino de la Segarra está preparando una batalla legal contra el ICAM de Lleida después de que le hayan concedido el alta médica pese a que, señala, no puede trabajar. Ricard Sala explica que toma una medicación muy fuerte por otro problema en la columna que no le permite conducir, a pesar de que trabaja como transportista y que esta medicación no aparece en los informes médicos del ICAM. Asimismo, tras ser operado de la muñeca, debe hacer dos meses de rehabilitación. Sin embargo, el tribunal médico considera que, pese a estar en rehabilitación, puede seguir con su trabajo de camionero, según denuncia. “He consultado con los Mossos d’ESquadra y me han dicho que con esta medicación no puedo conducir. Es como si fuera bebido al volante. Es un riesgo para mí y para el resto de la ciudadanía”, dice. Disconforme con la decisión del ICAM, inició el proceso para revocar el alta, pero, según denuncia, el organismo no se lo permite, apunta, a causa de la pandemia. Por ello, ya ha contactado con un abogado para poder resolver el conflicto en los tribunales, con importantes gastos. “Como mínimo, llevar mi caso al juzgado me costará 3.000 euros. No entiendo por qué no se puede resolver de otra manera. Todos los médicos que me han visitado dicen que no puedo trabajar, pero, aún así me dan el alta”, explica. Este leridano confía en que su denuncia sirva para que otros afectados puedan explicar su caso y lamenta los daños que le está ocasionando esta situación a su bienestar. “He llamado a todas partes y nadie sabe decirme cómo puedo solucionarlo. El lunes tengo que ir a trabajar, pero también debo seguir con la rehabilitación, y no sé si me afectará a mi puesto de trabajo”, lamenta.