IMÁGENES | Varios puntos del centro urbano de Lleida acumulan cada noche todo tipo de residuos y objetos fuera de los contenedores

La palabra “basuraleza” es cada vez más utilizada para denominar a los residuos que aparecen en los parajes naturales, como bosques o mares, lugares que deberían estar libres de ellos. Haciendo un símil, puede concluirse que en Lleida ciudad prolifera cada vez más la “basuraleza”, ya que a diario pueden verse todo tipo de desechos y objetos fuera de los contenedores, y lo mismo sucede en las distintas partidas de l’Horta.

En el centro urbano, hay sitios que se han convertido en auténticos puntos negros. Uno de ellos es el entorno de la isla de contenedores ubicada a la altura de Rovira Roure 36, muy próxima al Passeig de Ronda. Cada noche es habitual que haya bolsas, cajas de cartón, plásticos y todo tipo de objetos –el pasado miércoles había una lavadora– desperdigados a su alrededor. Otro son los contenedores soterrados de la plaza Santa Maria Magdalena, donde también cada día hay montones de residuos en su entorno. Son solo dos de los principales ejemplos porque, además, muchas personas dejan objetos voluminosos de los que quieren deshacerse directamente en la calle, sin avisar al servicio gratuito de recogida que ofrece para este tipo de residuos Ilnet, la concesionaria de la limpieza y recogida de basuras. Prueba de ello es que el pasado año Ilnet prestó 3.855 servicios de recogida de voluminosos concertados previamente (con la particularidad que en un 23% de ellos no había nada cuando pasaron los operarios), mientras que un total de 26.880, más de ocho veces más, fueron de oficio, es decir, los operarios retiraron objetos que se encontraron por la calle mientras hacían la ruta para recoger los concertados.

Talamonte señala que muchos ciudadanos no saben que hay un servicio gratuito de recogida

El teniente de alcalde responsable de de Medio Ambiente, Sergi Talamonte, señaló que no hay un problema de falta de contenedores, sino de incivismo. “Los contenedores no llegan a saturarse, salvo quizás en algún caso muy puntual algún fin de semana”, indicó. “Lo que pasa es que estamos encontrando muchos vertidos al lado de los contenedores”, destacó. En este sentido, detalló que en el caso de la plaza Santa Maria Magdalena, la brigada de Medio Ambiente ya ha conseguido identificar a algunos establecimientos entre los autores de los constantes vertidos, por lo que próximamente se les impondrá la multa que la ordenanza prevé para este tipo de infracción, que es de un mínimo de 400 euros. Talamonte detalló que el importe final puede ser más alto dependiendo de la peligrosidad del residuo (si son cristales rotos que pueden cortar, por ejemplo) o de la reiteración, entre otros aspectos.

Sobre los objetos voluminosos como muebles o electrodomésticos que son abandonados en la calle, consideró que aparte del incivismo, hay un problema de desconocimiento del servicio gratuito de recogida, del que puede hacerse uso simplemente llamando por teléfono. Además, Talamonte apuntó que algunas personas los dejan en la calle pensando que alguien podrá reutilizarlos.

Primeras sanciones a la espera de las cámaras de vigilancia Las partidas de l’Horta sufren vertidos tanto junto a las islas de contenedores como en espacios relativamente escondidos. El pasado año, Ilnet limpió más de 1.500. El teniente de alcalde Sergi Talamonte confió en que las cámaras de videovigilancia que comenzarán a instalarse el próximo año en varias partidas ayuden a identificar a los autores y tengan un efecto disuasorio. Añadió que la brigada de Medio Ambiente han logrado identificar a media docena por las características de los residuos o por la colaboración vecinal que han sido sancionados.