El ayuntamiento de Lleida todavía no ha retirado el escudo franquista que hay en Gardeny

El escudo franquista que hay en el edificio de Capintanía de infantería de Gardeny todavía no se ha retirado un año y medio después de que el ayuntamiento se comprometiera a ello. Su retirada lleva arrastrándose desde 2017, cuando el gobierno municipal de entonces, con el PSC al frente, lo cubrió con una lona después de la polémica por la pervivencia de símbolos franquistas en la ciudad y aseguró que estudiaría cómo quitarlo. En verano de 2019, el edil de Cultura y acalde accidental en ese momento, Jaume Rutllant, se comprometió a retirarlo “por voluntad política y apoyados en la ley de Memoria Histórica”, aunque reconoció que “requiere preparación y trabajo técnico”. Un año más tarde, el alcalde, Miquel Pueyo, y el teniente de alcalde de Urbanismo, Toni Postius, reconocieron que todavía están estudiando qué hacer con el escudo y cómo retirarlo. Ayer, fuentes municipales precisaron que “se ha abierto un período de consultas” sobre cómo llevar a cabo su desmantelamiento, que reconocen “es complicado”. Este es de los últimos vestigios de la dictadura que quedan después de que en octubre se retiraran las últimas placas franquistas que había en edificios de viviendas de la ciudad. Actualmente el escudo está sin la lona que lo cubría desde 2017.