La Universidad de Lleida presentará denuncia por los daños que ha sufrido el Rectorado durante la detención de Pablo Hasel
La Universidad de Lleida denunciará los daños que ha sufrido el edificio del Rectorado durante la detención del rapero Pablo Hasel con el fin de poder cobrar del seguro, según ha explicado el rector Jaume Puy. Los desperfectos se centran sobre todo en mobiliario como bancos, sillas, armarios, ventanas y puertas, entre otros.
Puy ha lamentado la situación que se ha vivido en los dos últimos días y ha remarcado que no solicitó la entrada de los Mossos sino que estos le comunicaron la actuación para dar cumplimiento a la orden judicial para arrestar a Hasel. El rector de la UdL ha dicho que ahora se llevarán a cabo trabajos para recuperar los espacios del Rectorado a fin de que la actividad académica se pueda reanudar lo antes posible.
Puy ha lamentado los hechos que han tenido lugar desde la mañana de este lunes al edificio del Rectorado. Así, ha explicado que desde el equipo rectoral intentaron dialogar con las personas que participaban en el encierro con la consigna que se pudiera contabilizar la actividad académica con la protesta pero "las cosas se fueron complicando" y no fue posible. "Se hubiera permitido que las reivindicaciones tuvieran una resonancia mediática, pero no es lo que ha pasado después con el cierre" y "se ha llegado a una situación a la cual no nos hubiera gustado llegar nunca", ha señalado.
El rector de la UdL ha dicho que, a pesar de comprender las reivindicaciones de Hasel y de las personas que le dan apoyo, los métodos que se han utilizado -en el encierro- "las vemos difíciles de entender". En este sentido, se ha referido, por ejemplo, al hecho de que cerraran con cadenas las puertas de acceso al edificio y que "sólo pudieran entrar las personas que ellos consideraban".
Además, "utilizar metodologías para defender una persona que impliquen acciones de violencia contra los demás, no ayudan a defender las ideas que se pretendían defender con la acción reivindicativa", ha añadido.
Puy ha remarcado que el desalojo de las personas que participaban en el encierro ha sido "relativamente pacífico" y "no se han lamentado daños personales". Sin embargo, "hay algunos daños materiales, sobre todo centrados en mobiliario, que ahora se evaluarán", ha indicado.
En este sentido, ha explicado que prevén presentar una denuncia por los daños que ha sufrido el Rectorado. De todos modos, el rector ha dicho que la denuncia no se dirige contra nadie en concreto, sino por los daños que han sufrido las instalaciones con el fin de poder cobrar del seguro. Jaume Puy ha afirmado que, en ningún caso, pidió a los Mossos la entrada en el recinto para desalojar el encierro, sino que la policía le comunicó que tenía una orden judicial para detener a Pablo Hasel, que se encontraba dentro del Rectorado.
Según Puy "los responsables de las acciones de los Mossos son sus mandos" y, en este sentido, "el rector no tiene ninguna potestad para ordenar nada a la policía", ha señalado.