Condenan las agresiones a los agentes en las protestas por Hasel
El alcalde de Lleida: "La violencia y el vandalismo de una minoría no son la respuesta"
Las secciones sindicales ASIGULL, UGT, CGT, CSIF, CCOO y AFILL de trabajadores del ayuntamiento de Lleida han emitido un comunicado conjunto en el que condenan la violencia "de una minoría" en las protestas del martes en la ciudad por la detención de Pablo Hasel.
Los sindicatos, que "defienden el derecho a manifestación y expresión", felicitan al colectivo de la Guardia Urbana de Lleida, "que, sin la equipació ni la formación necesaria para este tipo de actuaciones de orden público, han aguantado estoicamente ante el lanzamiento de piedras, botellas de vidrio, petardos, pintura, mesass y sillas, evitando daños, mayores en establecimientos privados y mobiliario público".
"Deseamos una rápida recuperación a los compañeros heridos por unos radicales que sólo han ido a hacerles daño", añaden al comunicado. "Condenamos y animamos a todos los representantes políticos a sumarse a la condena".
En este sentido, los sindicatos exigen a la corporación municipal "una defensa clara e institucional de sus trabajadores y de los bienes públicos, como medida preventiva a futuras agresiones". También reclament que el ayuntamiento se persone como acusación particular en futuras acciones judiciales derivadas de estos hechos.
Miquel Pueyo condena las agresiones
Esta mañana, a través de su cuenta de Twitter, el alcalde de Lleida, Miquel Pueyo, ha defendido que "la violencia y el vandalismo de una minoría no son la respuesta" y ha condenado las agresiones a los agentes de la Guardia Urbana.
Los disturbios en la protesta de Lleida empezaron cuando la marcha, que había salido de la plaza de la Catedral y recorrido el Eje Comercial, entró en la rambla Ferran. A medida que se acercaba a la subdelegación del Gobierno español, varios manifestantes empezaron a tumbar los contenedores y prenderles fuego. Los Mossos, con efectivos de la Brigada Móvil y los ARRO, rodearon la subdelegación. Losradicales les lanzaron petardos, piedras, cristales, pintura y sillas y mesas que había en la terraza de un bar.
Ante el avance del cordón policial, se dirigieron rápidamente hacia la avenida Blondel, donde hicieron varias barricadas. Los Mossos lanzaron salvas pero no hubo cargas.
Fue allí donde agredieron a tres agentes de la Guardia Urbana que iban con moto.També prendieron fuego a dos de las motocicletas, que quedaron completamente calcinadas, y causaron daños a una tercera. Fueron rescatados por sus compañeros. Dos de ellos fueron evacuados al hospital Arnau. Hubo otro urbano herido y también dos mossos lesionados.