El Comú desata la guerra en la Paeria al atacar a Postius y criticar el futuro albergue

El acuerdo de gobierno entre ERC, JxCat y el Comú en la Paeria, bautizado como Pacte d’Entesa, está perdiendo la “entesa” a marchas forzadas, hasta el punto de que la situación empieza a ser muy difícil de reconducir. Las escaramuzas internas de las últimas semanas a raíz de las irregularidades señaladas por el propio gobierno, concretamente por las concejalas Jordina Freixanet (ERC) y Elena Ferre (Comú), en tres contratos menores de Deportes -que acabaron con el cese de Sergio González como responsable del área y su marcha del grupo de Junts para ser edil no adscrito- se convirtieron ayer en una guerra pública entre el Comú y JxCat.

Y es que los primeros no solo volvieron a pedir más responsabilidades políticas, sino que apuntaron directamente al líder de los segundos y teniente de alcalde de Urbanismo, Toni Postius.

Seis días después de que la comisión municipal de Transparencia abordara este asunto, el Comú afirmó en un comunicado que “hace falta ir más allá en la asunción de todas las responsabilidades políticas”, y que González afirmó en la comisión que “el concejal de Urbanismo era conocedor de todo lo que hacía y de los contratos que tramitaba su departamento”. Tras destacar que una sola empresa acumuló en un año contratos menores por 121.000 euros, indica que 115.110,23 eran de Urbanismo y solo 6.025,80 de Deportes.

“El concejal de Urbanismo [Postius] es el responsable final de todos los expedientes que ha firmado en la partida de mantenimiento de edificios”, sostiene. Añade que “a pesar de estas evidencias” y de lo dicho por González, “el concejal de Urbanismo no asumió ninguna responsabilidad y optó por apuntar a técnicos y a otros departamentos”.

“Lamentamos que no se hayan asumido todas las responsabilidades políticas que se derivan de las irregularidades detectadas”, concluye..

El grupo de JxCat no quiso hacer ayer ninguna declaración, aunque este diario pudo saber que hay un gran malestar por la actuación de sus socios, que ve totalmente injustificada.

Paradójicamente, el cese de González y todas las desavenencias entre los socios se han producido a pesar de que el alcalde, Miquel Pueyo, dio por cerrado este asunto el 27 de enero, cuando anunció que, a raíz del informe interno, recuperaba la competencia de autorización del gasto en mantenimiento de edificios. Una nota oficial de la Paeria hecha pública ese día afirmaba que “como respuesta a las conclusiones del informe”, Pueyo decía que “como alcalde, recupero la autorización y el control del gasto de esta partida”.

No había ningún cese, ni se reclamaba responsabilidad política alguna, pero el Comú y la propia asamblea local de ERC sí los pidieron acto seguido, provocando la actual crisis.

Socio "inquieto"

El Comú ya había generado conflictos menores cuando el pasado verano censuró la actuación de Pueyo como alcalde durante la crisis por el Covid, y después pidiendo el cese de Joan Ramon Castro como edil de Movilidad, pero nunca hasta este punto.

Pueyo se pone de perfil y hoy habrá junta de gobierno antes del pleno

El alcalde, Miquel Pueyo (ERC) eludió ayer pronunciarse sobre la guerra abierta entre sus dos socios de gobierno. Fuentes próximas a alcaldía se limitaron a apuntar ayer por la tarde la posibilidad de que hoy aborde esta cuestión durante el pleno. Precisamente, antes del pleno, fijado para las 9.30 horas, se ha convocado una reunión extraordinaria de la junta de gobierno local. El comunicado de ayer del Comú contrasta con el hecho de que Pueyo manifestara por escrito en la última comisión de Transparencia que daba este tema por zanjado.