ENSEÑANZA ESCOLARIZACIÓN
El Síndic insta a dar alternativas a las clases presenciales a un alumno
La familia dice que tiene enfermedades que le impiden ir al centro por la pandemia || Educación afirma que no ha aportado un certificado de la sanidad pública
El Síndic de Greuges de Catalunya, Rafael Ribó, insta a Educación a ofrecer una alternativa a las clases presenciales
a un alumno de una escuela de Lleida del que sus padres afirman que sufre enfermedades que le impiden ir a clase con la pandemia de coronavirus. Los servicios territoriales de Educación, en cambio, aseguran que la familia no ha aportado el certificado de la sanidad pública que corrobore su situación.
La familia del alumno elevó su queja a la sindicatura en octubre del año pasado después de haber presentado en agosto la solicitud de atención educativa domiciliaria para este curso 2020-2021 alegando que su hijo tiene “diversas patologías relevantes, en concreto enfermedades pulmonares, razón por la cual pidió a los servicios territoriales de Educación que se le valorara para poder seguir los estudios desde casa”, según consta en la resolución del Síndic. Detalla también que los padres consideran que “es muy peligroso para el alumno por la situación de pandemia ir presencialmente a la escuela, ya que las patologías pulmonares que padece podrían agravarse”, por lo que ellos mismos le dan clase en casa, y añade que “el retraso en la respuesta le perjudica gravemente”, ya que “no se le hace un seguimiento desde la escuela y no ha sido evaluado durante el primer trimestre”.
El Síndic dice que comparte que “la educación presencial ha de tener carácter prioritario”, pero añade que “las solicitudes de escolarización no presenciales por razones médicas se han de poder resolver de forma individualizada en los términos que prevén las instrucciones emitidas por Educación con la máxima celeridad”. Por ello, sugiere al departamento que “resuelva de forma urgente la solicitud de atención educativa no presencial presentada por primera vez en agosto de 2020 por la familia y que, en caso de que no se considere adecuada la atención domiciliaria, se adopten medidas alternativas que prioricen el interés del alumno y su derecho a la educación”.
El director de los servicios territoriales de Educación, Carles Vega, remarca que requirieron a la familia del alumno “un certificado médico de la sanidad pública que corroborara que no puede acudir al centro educativo y que no puede llevar mascarilla”, y asegura que no lo ha aportado. Destaca que este procedimiento lo marca la normativa y que si no se le ha aceptado la solicitud es porque “no cumple con los parámetros”. Además, indica que cree que este estudiante ya va a clase.