Los familiares de los fallecidos por covid en la Llar Sant declaran que no se adoptaron las medidas necesarias

El juzgado de instrucción número 1 de Lleida, que investiga la gestión de la Llar Sant Josep de Lleida, donde en 20 días murieron 36 de los 89 residentes, ha escuchado este miércoles el testimonio de los familiares de 3 de las 6 a las víctimas representadas por el abogado Xavier Prats. Las otras 3 declararán el 24 de marzo. Según ha explicado Prats, las familias han señalado como responsable principal de las muertes a la directora del centro porque no adoptó, dicen, las medidas de prevención y seguridad necesarias para hacer frente a los contagios. El letrado también ha explicado que, a petición del juzgado, el director médico del CAP Primer de Maig ha desmentido en un informe que se ahogara atención sanitaria en la residencia, tal como declaró la directora.

La directora de la residencia declaró el 9 de octubre de 2020 y explicó que estuvieron sin médico del 16 al 26 de marzo y que ante la imposibilidad de contratar a más médicos, pidió ayuda al CAP Primer de Maig, situado en frente mismo, pero que los médicos se negaron a ir. El magistrado solicitó entonces en el Centro de Atención Primaria que informara si se negó la atención sanitaria en la residencia y, si fue así porque, y el informe ya ha llegado. Según ha explicado Prats, en el escrito, el director médico del CAP asegura que no se negaron a atender a los usuarios de la residencia y concreta que el 19 de marzo de 2020 dieron asistencia a un paciente, el 21 de marzo en 3 y el 25 de marzo en 3 más, unas fechas que coinciden con los 10 días en que la directora reconoce que estuvieron sin médico.La mujer también declaró que ella hizo "todo el posible" para atender a los usuarios. Los familiares de las víctimas, sin embargo, no opinan lo mismo. Los testimonios que han declarado este miércoles se han quejado de la "falta de humanidad y de contacto con las familias" por parte de la directora, según Prats, y de la "falta de ética" ya que, por ejemplo, hasta el 10 de abril en el centro estuvieron compartiendo habitación pacientes con covid-19 y pacientes que no tenían y que instalaron en una habitación en qué acababa de morir una persona de covid-19 en otra, que también acabó muriendo de coronavirus.Las familias denunciantes acusan tanto en la residencia Llar Sant Josep como su directora de homicidio por imprudencia, de delito continuado de omisión del deber de socorro, delito continuado de atentado contra la integridad moral y de un delito continuado contra los derechos de los trabajadores, por la muerte de sus familiares. La Llar Sant Josep de Lleida es de titularidad pública y ha sido una de las residencias de personas de la tercera edad que tuvo más muertos de covid-19 con 36 personas entre el 28 de marzo y el 15 de abril de 2020, el 40% de los residentes.