El Hospital Arnau de Vilanova de Lleida estrena un neuronavegador y un microscopio de última generación

El Hospital Universitario Arnau de Vilanova (HUAV) de Lleida ha renovado su servicio de Neurocirugía con los equipamientos tecnológicos más punteros que hay en este campo. Concretamente, ha adquirido un nuevo neuronavegador y un microscopio que permitirán mejorar la asistencia al paciente neuroquirúrgico y evitarán unas una cincuentena de derivaciones al año en otros centros que, hasta ahora, por motivos de complejidad, no podían asumirse con garantías en el hospital leridano.

El servicio de Neurocirugía del hospital leridano trabaja de forma coordinada con el de la Vall d'Hebron, que aporta apoyo asistencial y científico. La incorporación de estos nuevos equipamientos a Arnau ha sido posible gracias a la financiación de la Diputación de Lleida.

La cirugía cerebral tiene que permitir cuidar la enfermedad, pero siempre con el objetivo de preservar las funciones neurológicas de las áreas cerebrales implicadas. Con este propósito, la neurocirugía está obligada a implementar todos aquellos avances científicos y tecnológicos disponibles para minimizar los riesgos relacionados con las cirugías y, por lo tanto, para mejorar el pronóstico de los pacientes.

Los nuevos equipamientos incrementan la precisión y la seguridad de las intervenciones, y son clave en los procedimientos neuroquirúrgicos, ha explicado el responsable del servicio de Neurocirurgia de l'HUAV y cabe clínico del servicio de Neurocirurgia de l'Hospital Universitari Vall de Hebrón, Fuat Arikan.

En este sentido, ha indicado que el neuronavegador se comporta como si se tratara de un GPS cerebral, ya que incorpora las pruebas de radiodiagnóstico prequirúrgicas realizadas a los pacientes al campo operatorio.

"Eso es posible gracias a una precalibració justo antes de iniciarse la cirugía y de dos cámaras que informan, en todo momento y a tiempo real, en qué localización del cerebro nos encontramos", ha explicado. "Evidentemente, supone un gran avance y aporta mayor fiabilidad y seguridad, lo cual se traduce en menos complicaciones y menos riesgos de secuelas neurológicas," ha destacado Arikan.

Por su parte, el microscopio sirve para magnificar el campo quirúrgico y dar mayor precisión al cirujano para respetar las estructuras cerebrales relacionadas con la lesión. "Estructuras pequeñas se pueden visualizar con gran detalle, cosa que aporta la seguridad y precisión necesarias en un órgano tan delicado y noble como es el cerebro, durante el procedimiento neuroquirúrgico que supone la resección de los tumores cerebrales", según Arikan.

"La gran magnificación que nos aporta el microscopio quirúrgico nos permite minimizar los daños en las estructuras cerebrales que rodean las lesiones y, por lo tanto, como más seguridad y fiabilidad menos complicaciones, menor riesgo de secuelas, disminución del tiempo de hospitalización y convalecencia y, en definitiva, una mejor asistencia para el paciente", ha añadido.

El servicio de Neurocirugía del hospital leridano practica por término medio cada año unas 250 intervenciones quirúrgicas y trabaja de forma coordinada con su homólogo del Hospital Universitario Vall d'Hebron, que aporta apoyoasistencial y científico.

"El Arnau de Vilanova cuenta actualmente con un servicio de Neurocirugía completamente renovado, potenciado con profesionales y la tecnología más puntera disponible para la práctica neuroquirúrgica," ha dicho Arikan. En este sentido, ha resaltado que "el neuronavegador es el más moderno y potente que hay actualmente en toda Catalunya".