La pandemia agudiza la pobreza

Creu Roja de Lleida ha atendido en el último año a más de 74.000 personas en situación de vulnerabilidad en el marco del programa Respon, el plan específico para hacer frente a la crisis económica y social provocada por la Covid-19. La campaña, que ha supuesto un incremento en el gasto anual de la entidad de 976.558 euros, ha movilizado en las comarcas leridanas a 342 voluntarios que han invertido más de 6.000 horas de trabajo para mitigar los efectos sociales de la pandemia.

“Se trata del mayor despliegue de recursos humanitarios de la historia de Creu Roja”, explicó ayer durante la presentación del balance la coordinadora provincial de la entidad, Mireia Garra, quien destacó que la Covid-19 ha aumentado el riesgo de exclusión social y de precariedad económica de las familias leridanas, pues más de 22.000 personas −un 30%− acudieron por primera vez a la entidad para cubrir las necesidades básicas. Desde marzo del 2020, han distribuido 45 toneladas de alimentos, han gestionado 22.480 entregas de bienes de primera necesidad y han repartido 2.693 tarjetas para la compra de comida y productos frescos.

Para todas aquellas personas en situación de vulnerabilidad que debían cumplir cuarentena al dar positivo de Covid-19 o tener un contacto estrecho con un contagiado, Creu Roja de Lleida ha gestionado 99 plazas en dos albergues: 78 durante el pasado verano en el Hotel Ibis de Torrefarrera y 21 en un refugio en Bellpuig que, a día de hoy, sigue en activo. Además de distribuir 150.000 mascarillas y llevar a cabo treinta entregas de medicamentos a domicilio, la entidad gestionó 13.304 llamadas de promoción de la salud para minimizar el contagio entre la población de riesgo y habilitó dos líneas para dar respuesta a las demandas de ayuda psicológica.

Uno de campos de batalla en el último año ha sido la brecha digital. Y es que el 62,8% de las familias con niños tuvieron dificultades para seguir las clases online.

En este sentido, hicieron 2.542 acciones de refuerzo educativo y hicieron 1.340 entregas de material, como tablets. .

La mayoría de usuarios son empleados afectados por los ERTE La mayoría de usuarios que en el último año han acudido por primera vez a Creu Roja para solicitar ayuda eran trabajadores afectados por un ERTE que, debido a la crisis económica provocada por la Covid-19, se quedaron sin ingresos económicos de forma súbita. Según explicaron desde la entidad, “hemos visto cómo la crisis ha incrementado el conocido como ‘síndrome de la nevera vacía’, personas que no tenían la suficiente capacidad económica para ahorrar y que viven al día”.

Más de la mitad de estos 22.000 nuevos usuarios son mujeres de entre 25 y 49 años, cabezas de familia con hijos a cargo que en muchas trabajaban en empleos de economía sumergida. .