SUCESOS PANDEMIA
La Urbana controlará la canalización para evitar nuevos botellones
Varios grupos se concentraron ayer por la tarde en la zona, pero sin beber alcohol|| El agente herido el jueves está de baja y no se ha identificado al autor de la agresión
La Guardia Urbana controlará la canalización del río Segre en Lleida para evitar que se vuelvan a producir nuevos botellones con numerosas personas como el que tuvo lugar la tarde del jueves cerca del campus de Cappont. El objetivo es evitar concentraciones masivas para prevenir contagios por la Covid-19 y garantizar que se cumplan las medidas sanitarias establecidas para ello.
La tarde del jueves, la Urbana y los Mossos d’Esquadra tuvieron que actuar para disolver a un grupo de 250 jóvenes que se habían concentrado en la canalización del río, en la zona universitaria, con consumo de bebidas alcohólicas, sin respetar distancias y en la mayoría de los casos sin llevar mascarilla, como ya informó ayer SEGRE. Durante la actuación, un grupo de personas lanzó objetos contra los agentes, resultando herido en la cabeza un urbano por una pedrada.
El agente tuvo que ser atendido en un centro sanitario y recibió varios puntos de sutura, por lo que se encuentra de baja. No se ha podido identificar al autor de la agresión, por lo que no se ha podido presentar denuncia por estos hechos.
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Durante la tarde de ayer, volvieron a reunirse un gran número de personas en la canalización del río, sobre todo cerca del campus de Cappont. La mayoría eran grupos de jóvenes, aunque también había familias.
En algunos casos, aunque se respetaba la distancia entre los grupos, no se llevaba mascarilla. En este caso, no hizo falta la intervención policial al no producirse incidentes.
La asociación de vecinos de Cappont ya denunció el jueves que hace días que se produce esta situación, con concentraciones de grupos numerosos de personas en la canalización con la llegada del buen tiempo, y alertan de incumplimiento de las restricciones. La Urbana, así como los Mossos, vigilarán que se cumplan las medidas sanitarias, sobre todo con la llegada del fin de semana, cuando se incrementan estas reuniones en zonas como la canalización del río Segre.
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Asimismo, durante el fin de semana también aumentan las intervenciones policiales por actos incívicos como molestias vecinales por ruidos y la música alta. Se hacen patrullas en zonas donde se han detectado también posibles reuniones ilegales.