Clot y oposición censuran el cierre de las 'bressol' despreciando la moción

La decisión del gobierno de la Paeria (ERC, JxCat y el Comú) de finalizar la concesión como centros públicos de las ‘escoles bressol’ Germans Grimm y Vailet del Clot, pese a que el pleno aprobó una moción del PSC para mantenerlas, provocó ayer las críticas tanto de los vecinos del barrio como de la oposición. El presidente de la entidad vecinal del Clot y Confluències, Manel Rodríguez, reconoció que se esperaba que la moción no serviría de nada porque “ya estaba todo decidido”.

“Me ha sabido muy mal que digan que cierran las ‘escoles bressol’ por motivos económicos, porque si es por eso podían haber ‘tocado’ otra cosa. Pero parece que en el Clot lavamos su ropa sucia.

Pagamos impuestos de primera y no tenemos servicios, y los pocos que tenemos nos los cierran”, señaló. Acusó al tripartito de no escuchar las críticas porque “su idea era cerrar” y cree que “el PSC tiene parte de culpa también porque creó las concesiones sin revisar después el contrato”.

Por su parte, la edil socialista Cristina Morón ve “insólito” que no se garantice la continuidad de los centros después de la moción y acusó al gobierno de “aplicar el rodillo”. Planteó dudas jurídicas sobre la modificación de la concesión y dijo que la aportación municipal para el curso 2020-2021 fue de 356.000 euros, con los que “solo con el sobrecoste anual del gobierno se puede pagar un año de escoles bressol”.

Ángeles Ribes, portavoz de Cs, cree que el gobierno demuestra “nula sensibilidad hacia las familias y las educadoras de esos centros”. “El tripartito fue absolutamente cobarde en el pleno al abstenerse en la moción y deshonesto por no votarla en contra y mantenerse en su criterio.

Una muestra más de que el gobierno les viene grande”, indicó. Y el portavoz del PP, Xavier Palau, lamentó que “el gobierno haga política de escaparate porque en el pleno votó una cosa que daba alas a pensar que se podían mantener y finalmente, tres días después, decide cerrarlas perjudicando a las familias, los niños y la vertebración del barrio”.

“No se puede votar una cosa y engañar haciendo después otra. Cuando un concejal engaña debe asumir responsabilidades políticas”, remarcó.

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