Así será el albergue de Lleida para temporeros y personas sin hogar

El albergue que la Paeria construirá en el solar del número 2 de la calle Josep Pallach de Pardinyes será un “edificio comunitario multiusos” de 120 plazas para acoger a temporeros en la campaña de la fruta, ‘sin techo’ del plan Iglú, personas en casos de emergencias e intercambios educativos o colonias. El conseller de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias, Chakir el Homrani, y el alcalde, Miquel Pueyo, firmaron el protocolo por el que la Generalitat financiará su construcción con 4 cuatro millones y prevén que esté listo para la campaña de 2022.

El Homnari dijo que este equipamiento era “una deuda con la ciudad” y Pueyo dijo que “después de que en 2010 Lleida dejó pasar la oportunidad de construir un albergue, este da respuesta a una necesidad histórica y será un servicio al conjunto de la ciudadanía”.

La Paeria licitó ayer la redacción del anteproyecto de este edificio modular por 13.000 euros, y su memoria descriptiva plantea que siga el modelo de apartahotel o co-housing con habitaciones para 4 personas con camas o literas, taquillas individuales, preferiblemente con baño completo y con una cocina-office por cada dos habitaciones. Asimismo, prevé un mínimo de 8 habitaciones individuales para situaciones especiales como enfermedad o aislamiento y accesos distintos cada 5 o 6 dormitorios para diferenciar perfiles de personas alojadas.

Prevé un patio de ocio con mesas y sillas y detalla que el acceso para usuarios deberá ser mediante una tarjeta magnética o con reconocimiento facial o dactilar. Para las personas que no pernocten se plantea que disponga de consignas individuales, diez duchas y lavandería autoservicio.

La memoria contempla espacios comunitarios como un bar-restaurante, una zona con TV y ordenadores y una sala polivalente para talleres, conferencias o exposiciones, que en caso de emergencia climática se podrá destinar a pernoctación con hamacas. Prevé también una azotea verde con posibilidad de huertos urbanos.

La Paeria pretende que el equipamiento sea utilizado por los vecinos del barrio más allá de su uso temporal en la campaña de la fruta y el Plan Iglú..

Ayudas del Govern y la Diputación para la campaña de la fruta

El conseller El Homrani remarcó que destinan un millón a ayudas para la contratación de proximidad a través del Servei d’Ocupació de Catalunya (SOC) y 952.602 euros para que patronales, sindicatos y administraciones locales contraten a 54 técnicos de mediación. Para gastos de alojamiento temporal y aislamiento por Covid, aporta 450.000 euros para la Paeria, 125.000 apara el consell del Segrià, 75.000 para el de la Noguera, 25.000 para el del Pla d’Urgell y el de Les Garrigues y 300.000 para el albergue de Bellpuig. El presidente de la Diputación, Joan Talarn, anunció la aportación de 300.000 euros para la campaña, 100.000 más que en 2020..

Mapa de recursos disponibles, que se activarán según las necesidades

A la espera del albergue, la Paeria destinará de nuevo este año pabellones de la Fira de Lleida para alojar a temporeros, pero la colaboración institucional se traducirá en un mapa de recursos disponibles en municipios de poblaciones frutícolas tanto de usos habitacionales como para acoger a personas que no tengan donde pasar el confinamiento. Trabajo recordó que el año dispusieron de mil plazas y remarcó que las instalaciones se irán activando en función de las necesidades. Por ejemplo, el Hotel Nastasi, el albergue de Bellpuig y la Manreana se destinarán a aislamiento de positivos. Además, este año habrá un coordinador de la campaña de la fruta.

Cacerolada para reclamar la residencia en ese solar

Más de 150 personas protagonizaron ayer una cacerolada de protesta para reclamar la residencia prevista en el solar de Josep Pallach. Además, ya han recogido unas 4.500 firmas (continuarán hasta el día 23) y tienen previsto presentar una moción en el pleno y acudir a la Síndica Municipal de Greuges. Consideran que el modelo de macroalbergue no es adecuado y critican que el gobierno municipal todavía no les ha recibido. Por su parte, la concejala Mariama Sall asegura que “el solar que inicialmente se prometió para la residencia no era este” (precisó que era el número 4 y el albergue estará en el 2) y dijo que valorarán “la petición de residencia y que pueda estar ubicada dentro del barrio”. En la memoria se indica que, “aunque no se proyectan, se consideran otros usos compatibles, como una residencia de proximidad, en el resto del solar”.