LLEIDA
Poca gente sin mascarilla en el Eje Comercial de Lleida a pesar de que la mayoría celebran la nueva normativa
Algunas personas dicen que seguirán llevando el tapabocas para sentirse "más seguras"
El fin de la obligatoriedad de llevar mascarilla a los espacios exteriores después de casi un año se ha trasladado de manera desigual a las calles de Lleida. Y es que buena parte de la gente que este sábado por la mañana ha salido al exterior lo ha hecho todavía con la mascarilla puesta, mientras otros han ido sin, sobre todo en aquellos espacios donde se puede respetar la distancia interpersonal.
En el Eje Comercial, la mayoría de la gente ha optado por ponerse la mascarilla, ya que, aunque muchos celebran la nueva normativa, aseguran que se sienten "más seguros", además de ser un acto de "respeto". Los que han ido a comprar también han dicho que es más cómodo llevar la mascarilla puesta todo el rato, para no tener que ponerla y sacar cada vez que entran en una tienda.
En el Eje Comercial, donde las calles son estrechas y muy concurridas, la mayoría de la gente ha seguido llevando la mascarilla por la dificultad en mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros, pero también por comodidad en el caso de la gente que ha ido a comprar. Esta imagen, sin embargo, también se ha repetido en el resto de calles de la ciudad, donde se ha podido ver todavía mucha gente con tapaboca. Mientras tanto, la mayoría de los que han optado por ir sin, llevaban una mascarilla en la mano, en el codo o en el cuello.
De hecho, algunos vecinos de la ciudad pensaban que la gente dejaría la mascarilla en casa y, en cambio, se han sorprendido al ver que en la gran mayoría de casos no ha estado así.