SUCESOS URBANA
Atraca y pega a su expareja con un palo en plena calle
Ocurrió entre los barrios de Pardinyes y Balàfia || La mujer huyó tras defenderse con un espray y el agresor fue detenido
Los sospechosos fueron conducidos a la comisaría de la Urbana.
La Guardia Urbana detuvo la madrugada del domingo a un vecino de Lleida acusado de agredir y robar a su expareja.
Otro hombre también fue arrestado por el robo. Los hechos tuvieron lugar a las 0.58 horas cuando una patrulla se dirigió a la calle Vidal i Codina, entre los barrios de Pardinyes y Balàfia, tras recibir el aviso de que una mujer estaba siendo agredida por su expareja.
Cuando los agentes llegaron al lugar observaron a uno de los posibles autores de los hechos, que resultó ser M.K., de 32 años de edad, de nacionalidad marroquí y vecino de Lleida.
Poco después de la llegada de los policías, apareció la mujer agredida, que explicó a los agentes que el hombre que habían identificado y su expareja le habían intentado robar su teléfono móvil y le habían agredido con un palo. Añadió que se pudo defender con un espray y había huido del lugar. La denunciante presentaba síntomas evidentes de haber sido agredida.
Los urbanos iniciaron una búsqueda del presunto maltratador en la zona. Minutos después, le hallaron escondido en unos matorrales que había cerca del lugar de la agresión. El individuo, M.G., de 56 años, de nacionalidad marroquí y vecino de Lleida, fue arrestado por la Policía Local como presunto autor de un delito de malos tratos y otro de robo con violencia. El hombre de 32 años fue arrestado por este último delito y ambos fueron llevados a comisaría.
Un segundo hombre también fue arrestado por intentar robar el móvil a la víctima
Los juzgados leridanos recibieron durante el primer trimestre del año un total de 452 denuncias por violencia machista, de las que una de cada diez fueron por quebrantamiento de medidas de protección de las víctimas. Entre enero y marzo de 2021, los tribunales recibieron un total de 90 solicitudes de medidas de protección por parte de mujeres que habían denunciado ser víctimas de violencia por parte de sus parejas o exparejas, de las que finalmente se autorizaron 67. Así, hubo 374 denuncias, lo que supone un aumento del 8% respecto a 2020.
