ESNOTICIA
El Govern refuerza los cribajes en los centros de día y cierra los 'rojos'
Los que estén asociados a una residencia con casos de Covid no podrán abrir || El Síndic abre una actuación para analizar si se dañan derechos de los residentes
Pruebas de antígenos esta semana en una residencia de Lleida.
Las consellerias de Salud y de Derechos sociales han decidido reforzar la vigilancia en los centros de día de gente mayor y discapacitados e incrementarán los cribajes en los centros que estén integrados en una residencia tanto a los usuarios como a los trabajadores.
Según informaron ayer ambas consellerias, los cribajes periódicos seguirán la misma pauta que las residencias, donde desde el martes se han aumentado de una a tres las PCR semanales a los trabajadores no vacunados, mientras que los que tienen la pauta completa se someten a una prueba a la semana. Derechos Sociales y Salud pretenden así por un lado evitar la entrada del virus en los centros de día sin que por ahora deban cerrar.
De este modo, los centros integrados en residencias se mantienen abiertos siempre que puedan garantizar burbujas de convivencia y espacios separados en relación con las residencias.
Si se detectara un brote, seguirían abiertos siempre que se puedan sectorizar, pero si la residencia a la que están adscritos es declarada ‘roja’ deberán cerrar. Además de los cribajes, se intensificará la vigilancia en todos los servicios para detectar posibles sintomatologías compatibles con Covid.
En Lleida, según la última actualización del pasado miércoles, todas las residencias están libres de coronavirus salvo dos, declaradas rojas: la de Arbeca, con seis positivos que estaban vacunados, y la Joviar, de Lleida, con dos residentes positivos, también correctamente vacunados. En ambos casos los síntomas son leves.
En cuanto a las residencias, la elevada transmisión comunitaria ha obligado a recuperar limitaciones de los momentos más críticos de la Covid y a las medidas que entraron en vigor el martes se suma la prohibición de salidas de menos de tres días.
Los residentes que salgan del centro deberán mantenerse en contacto con una sola burbuja de convivencia y deberán someterse a un test de antígenos a su regreso. La persona que los recoja también deberá seguir una prueba en el propio centro.
En este sentido, el Síndic de Greuges, Rafel Ribó, anunció ayer una actuación de oficio para estudiar si el endurecimiento de las medidas para acceder a las residencias de la tercera edad afectan a los derechos de los residentes.
En este sentido, ha remitido a las consellerias varias preguntas sobre estas medidas, que deben durar 14 días.
