Cuidado con lo que escribes en tus redes sociales
Las empresas se fijan en aquellos perfiles más respetuosos y honestos
Las redes sociales se han convertido en una extensión de nuestra personalidad. Uno de los objetivos es transmitir nuestros valores e ideas. Pero, en ocasiones, las cosas que más nos gustan de nosotros pueden no ser las más adecuadas para una empresa. Y ahora, gracias al informe sobre redes sociales de 2021 realizado por la empresa Infojobs, tenemos una mala noticia que darte: hasta el 48% de los responsables de reclutamiento de las empresas inspecciona los perfiles de las redes sociales de los candidatos durante el proceso de selección.
En realidad, no consultan de igual forma todas las plataformas. Existe una preferente para buena parte de los encargados de recursos humanos: LinkedIn, la cual investigan el 84% de estos profesionales. Esto es comprensible teniendo en cuenta que Linkedin está ideado precisamente para este tipo de cosas. De hecho, es la red social profesional más importante del mundo. Tiene sentido que los reclutadores la consulten para ver el historial laboral, el historial académico o las validaciones de aptitudes de otros usuarios. ¿Pero qué hay de las redes no laborales?
Pues la más consultada por los contratantes es Facebook. Aunque esta red social ha perdido importancia entre las generaciones más jóvenes, continúa siendo inspeccionada por un 72% de las empresas.
Le sigue Instagram con un 49%. En este sentido, agregan desde El Confidencial, es bastante probable que en próximas ediciones del informe aparezca TikTok. Al fin y al cabo, suele ser muy distinto lo que mostramos de nosotros en una red social como Facebook que en una como TikTok.
"La principal razón para rechazar a un candidato es la incoherencia entre lo comentado en la entrevista y lo que el profesional publica en sus perfiles", afirman desde El Confidencial. No te ayuda en nada presumir de no consumir alcohol y aparecer en quince fotos de Instagram con un cubata en la playa o en la discoteca. El segundo de ellos se refiere precisamente a eso: a las fotografías, aunque no se especifica de manera precisa cuáles echan para atrás a los reclutadores.
También hay otros motivos de rechazo, como las opiniones radicales en asuntos de religión u orientación sexual, los gestos irrespetuosos hacia otros usuarios, las faltas de ortografía, las críticas a las empresas en las que has trabajado anteriormente o las opiniones políticas extremas.
En definitiva, las compañías quieren personas respetuosas, positivas y con buena comunicación. Y es decisión tuya adaptar tus perfiles a sus deseos o ponerte unas piedritas en el camino.