Tres cosas en las que deberías pensar antes de renunciar a tu trabajo
Cambiar de trabajo es una decisión importante, por eso se debe tomar con mucha calma
Si estás harto de tu trabajo o simplemente necesitas un cambio en tu vida, ha llegado el momento de atreverte a romper con la estabilidad. Pero ojo, que precipitarse no suele ser buena idea y aún menos en este caso. Y para ello, nos resultará útil conocer tres cosas que todos deberíamos tener en cuenta antes de cambiar de trabajo, según trasladó el profesor de economía de la Texas A&M University, Anthony Klotz, al medio británico The Independent.
1. Pros y contras
Siempre se ha dicho que para decidir algo importante se debe hacer una lista analizando los pros y los contras. Como indicó el profesor Klotz, es crucial "considerar si es un problema que se podría resolver sin renunciar”. Recomendó poner en una balanza los aspectos positivos del lugar de trabajo y los negativos para así valorar, con calma, quién gana.
Es determinante plantearse todas estas cosas porque, como recordó Klotz, “cuando empiezas un trabajo nuevo, vuelves a empezar desde cero. No subestimes las cosas que dejas atrás. Cada vez más, las empresas están más abiertas a los 'trabajos a la carta', en los que puedes hablar con tu jefe y dices que te gusta el 80% del trabajo, pero no el 20 restante, y trabajas con él para diseñar un rol que se adapte a ti".
2. Nuevos problemas
¿La renuncia supone la solución a un problema o creará uno nuevo? Debes asegurarte de que en el nuevo lugar no se te complique más la vida. Y para ello, el profesor Klotz sugiere "hablar antes con los empleados de la nueva empresa o investigar en sitios como Glassdoor, una empresa de recursos humanos". Otro modo de estar bien seguro de la decisión es retrasarla 15 días para ver si, realmente, es un deseo temporal o se necesita de verdad.
3. Despedirse bien
Otro último aspecto crucial dentro de todo este importante proceso es marcharse del antiguo trabajo lo mejor posible. Primero de todo porque una pérdida ya es, en general, un palo para cualquier empresa, por lo que seguro que los superiores valoran que tu marcha genere el mínimo de problemas.
Y segundo y todavía más importante, porque vivimos en un mundo digital que es súper pequeño. Solo basta un mal comentario en LinkedIn o Twitter o rumores que hablen mal de ti, para que se te escapen oportunidades laborales.
En definitiva, piensa antes de actuar como no has hecho antes. Tus decisiones tienen el gran poder de marcar la suerte de tu mañana.
