RELIGIÓN EQUIPAMIENTOS
La Paeria ve difícil autorizar el oratorio de la calle Nord por los impedimentos urbanísticos
Castro califica de “escollos” la acera estrecha y que la calle sea de plataforma única|| Recuerda que con la actual ordenanza es “inviable” y con la nueva, en fase de redacción, “es complicado” permitirlo
La comunidad musulmana prevé un oratorio y centro cultural en el número 23 de la calle Nord.
La Paeria ve difícil autorizar la apertura de un oratorio musulmán en el número 23 de la calle Nord, tal como plantea la comunidad islámica que reza en el Palau de Vidre, por impedimentos urbanísticos y de movilidad.
La alcadesa accidental, Sandra Castro, recordó ayer que con la actual ordenanza que regula la instalación de centros de culto “es inviable” y apuntó que existen “tres escollos” complicados de salvar incluso con la nueva normativa que están últimando. Detalló que, por un lado, la acera tiene 1,27 metros de anchura cuando la actual ordenanza indica que debe ser de 3.
“En la modificación (de la normativa) planteamos mantener los 3 metros y si no los tiene, anular plazas de aparcamiento para ensancharla, pero en este caso no se da esa circunstancia, no hay plazas de aparcamiento para poder ampliarla”, argumentó.
La segunda traba que cita Castro es que “la calle es preferente para peatones” y la tercera, que “es de plataforma única con un solo carril de circulacion que está tocando a la acera , de manera que si hay aglomeración de personas podrían invadir la calzada y desde movilidad no lo recomiendan”.
“Con la ordenanza actual es inviable y con la nueva, veremos cómo acaba quedando”, concluyó la alcaldesa accidental, aunque incidió en que “estas tres cuestiones limitan enormemente que se pueda implantar”. Subrayó que “haremos una regulación pensando en todas las comunidades religiosas, pero adecuada a las necesidades de movilidad y urbanismo de la ciudad, y los tres escollos hacen difícil pensar que en esa ubicación se pueda acabar implantando. Si hubiera una sola limitación..., pero siendo tres es complicado”.
El ayuntamiento autorizó a la comunidad islámica derribar el edificio de la calle Nord en el que prevé construir el oratorio.
La modificación de la normativa consensuada, en septiembre La modificación de la ordenanza que regula la instalación de centros de culto se encuentra actualmente en fase de redacción.
La edil Sandra Castro recordó que a principios de julio se reunieron con la Asamblea Municipal de las Religiones “para recoger propuestas y presentarles nuestra idea”, añadió que aportaron a la oposición “una primera propuesta de texto y nos pidieron poder hacer propuestas”. Estas aportaciones se pueden presentar hasta el 6 de septiembre y esa misma semana tienen previsto “cerrar un texto lo máximo de consensuado con el que el máximo de grupos municipales se sientan cómodos”.
En principio, la nueva normativa debe facilitar la apertura de pequeños oratorios de cualquier religión, pero siempre que cumplan unos requisitos.
En el caso del local de la calle Nord, dijo que “como centro cultural no habría problema, pero dejando claro que no se puede hacer actividades de culto”.
Carpa junto a Tarradellas para los rezos en septiembre y octubre La alcaldesa accidental afirmó ayer que la comunidad islámica, que usa habitualmente en el Palau de Vidre como mezquita, podrá instalar en septiembre y octubre una carpa en un solar próximo, puesto que el pabellón estará ocupado por la Fira de Sant Miquel y Municipàlia. “Nos pidieron dónde podían montar una carpa y se ubicará en el mismo solar en el que estuvieron hace dos años, que da a la avenida Tarradellas y está al otro lado de la rotonda de Victoriano Muñoz, cerca de la Fira de Lleida. Por tanto, no se les desplaza mucho de su ubicación actual”, detalló.
