EDUCACIÓN NUEVO CURSO
Libros de texto menguantes
Colegios dejan de usarlos al trabajar por proyectos y en Secundaria se pasan a los digitales || No obstante, las librerías siguen apostando por su venta
Comprar (y forrar) los libros de texto es un clásico que se repite cada año cuando se acerca la vuelta a las aulas.
Los libreros destacan la competencia que supone la venta por internet de los libros ya usados
Pero las innovaciones educativas que aplican algunos centros desde hace varios cursos está motivando que vayan prescindiendo de los libros de texto tradicionales. Jordi Caselles, de la librería Caselles y presidente del Gremio de Libreros de Lleida, explicó que algunos centros empezaron a socializar los libros (no son propiedad de los alumnos y se van pasando a las siguientes promociones) y después en algunas escuelas de Primaria han ido dejando de usarlos, pero indicó que en las etapas superiores, como Bachillerato o ciclos de FP sí siguen usándolos. También reconoció la competencia de las ventas por internet de libros de texto de segunda mano.
Por todo ello, afirmó que las librerías se toman actualmente la campaña de los libros de texto como un “complemento”. Detalla que antes los tenían en stock porque los acababan vendiendo, mientras que ahora funcionan básicamente por encargo, “pero hay que seguir dando este servicio”.
“Cuando acaban las clases en junio ya dan el listado de los libros del curso siguiente y vamos recibiendo reservas, que vienen a recoger ahora o a principios de septiembre”, señaló.
Por su parte, en Abacus coincidieron en destacar que los colegios de Infantil y Primaria “cada vez usan menos recursos físicos porque trabajan por proyectos” y añadió que en Secundaria “se vive una transición de los libros físicos a digitales”. Asimismo, subrayaron que este año están recibiendo muchos encargos online, mientras que el anterior se registraron colas en el establecimiento.
Precios muy dispares según el centro
El coste de los libros de textos es muy dispar en función del centro y, sobre todo, del número que utiliza. Por ejemplo, una escuela pública de la capital solo usa dos libros en tercero de Primaria y cuestan 40 euros en total, mientras que otra requiere una docena y supone una inversión de unos 300. En primero de ESO, el coste supera los 200 €, según precios consultados por este diario.