El Govern pide 9 años para los padres acusados de maltratar a su bebé

La dirección general de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA) de la Generalitat solicitó ayer nueve años de prisión durante el juicio contra los padres acusados de maltratar a su bebé de 10 días en agosto de 2019 en Lleida. La DGAIA considera que el padre es el autor de las graves lesiones que sufrió el pequeño mientras que acusa a la madre por omisión al conocer el carácter “violento” de su pareja. Por su parte, la Fiscalía solicitó una condena de tres años de prisión para el padre por un delito de lesiones por imprudencia, sin acusar a la madre, mientras que las defensas pidieron la absolución.

Durante el juicio, el acusado admitió que la noche del 12 al 13 de agosto de 2019 el bebé estaba llorando, que lo cogió y que, cuando se iba a sentar en el sofá, el pequeño se le cayó. “Creo que me quedé dormido e hice un movimiento brusco para sujetarle. Al ver que no reaccionaba, lo zarandeé hasta que volvió a llorar”, señaló.

Fue la madre quien vio que el estado del niño no era normal, por lo que decidieron llevarlo a urgencias del hospital Arnau de Vilanova. De allí, ante la gravedad de las lesiones, el bebé fue derivado al hospital Vall d’Hebron. El acusado también relató un hecho previo, dos días antes, cuando iban en coche y “al dar un volantazo” se cayó el capazo del niño. “Cometí un error porque no le puse el cinturón de seguridad”, declaró.

Los médicos que atendieron al menor en Vall d’Hebron declararon que las lesiones eran compatibles con un traumatismo no accidental y que eran de extrema gravedad, ya que incluso se llegó a temer por la vida del pequeño. El bebé fue dado de alta en octubre de ese año y actualmente continúa en recuperación, por lo que no pudieron valorar las secuelas que podría tener.

Al respecto, las forenses declararon que no tendrá una “normalidad en el día a día”, ya que necesitará ayuda por las secuelas, y que las lesiones son compatibles con el síndrome del bebé zarandeado. Según señalaron, también presentaba lesiones en el cuerpo de diferente cronología, como una fractura de clavícula, que según los peritos de la defensa podría haberse producido durante el parto.

Mientras, los Mossos d’Esquadra acreditaron el “carácter violento” del acusado a raíz del análisis de los mensajes que intervinieron en los móviles de la pareja, donde él llegó a desear la muerte de su hijo y de la madre. “Admito estos mensajes y que a veces hablo para hacer daño, pero nunca he maltratado a mi mujer ni a mis hijos”, declaró el acusado. La madre negó que su pareja maltratara al niño para hacerle daño a ella.