SUCESOS PRISIÓN
Un preso de Lleida agrede de gravedad a un funcionario
Según CCOO y CSIF, el trabajador sufrió varias fracturas en el globo ocular || El interno acumula varios expedientes
Los sindicatos CCOO y CSIF denunciaron ayer la agresión de un interno del módulo 6 del Centre Penitenciari de Ponent a un funcionario, que tuvo que ser ingresado en el hospital Arnau de Vilanova de Lleida y no se descarta que sea derivado a la Vall d’Hebron, ya que está a la espera de si debe ser intervenido por diversas fracturas en el globo ocular y en la zona del pómulo. Según informaron los sindicatos, la agresión tuvo lugar ayer por la mañana cuando el interno, de 46 años y que cumple condena de 3 años y medio de prisión por atentado a agentes de la autoridad, propinó un “brutal” puñetazo al jefe de la unidad. Justicia señaló que el interno se había negado a hacer tareas de limpieza.
Añadieron que este preso tiene problemas psiquiátricos y que durante el tiempo que lleva en Ponent ha protagonizado “numerosos incidentes violentos” contra el personal. Justicia ha llevado el caso ante el juzgado en funciones de guardia de Lledia y el interno ha pasado a régimen cerrado. Al respecto, el CSIF reclamó una “respuesta contundente” por parte de la conselleria de Justicia para acabar con las agresiones a los funcionarios penitenciarios, mientras que CCOO pidió que tomen medidas legales.
Asimismo, el sindicato reclamó más personal y denunció que la agresión se produjo en un módulo con una dotación de cuatro funcionarios para entre 80 y 90 internos. “La plantilla está envejecida y el nuevo sistema de distribución de la medicación no es eficaz, ya que ahora lo tienen más fácil para traficar con ella y no tomársela, teniendo en cuenta que la mitad de los reclusos tienen problemas de salud mental”, denunció CCOO. Asimismo, el CSIF valorará algún tipo de movilización.
En lo que va de año, hasta el 31 de agosto, se han registrado 15 agresiones a funcionarios en la cárcel leridana, lo que supone un aumento del 66% respecto al año pasado, según denunció el sindicato CSIF.