Piden 14,5 años de internamiento psiquiátrico en un centro penitenciario para intentar matar a la madre en Lleida
El acusado tiene esquizofrenia paranoide y el hombre reconoce que atacó a la mujer con un cuchillo "sin querer"
La Fiscalía ha pedido un máximo de 14 años de internamiento psiquiátrico en un centro penitenciario para un vecino de Lleida de 30 años acusado de intentar matar a la madre cortándole el cuello con un cuchillo, el 5 de agosto de 2020. Considera probado que, tal como han declarado los forenses, el hombre sufre esquizofrenia paranoide y que en el momento de los hechos sufrió un brote psicótico que lo hacía incapaz de valorar sus actos. Él mismo, en su declaración al juicio celebrado este miércoles en la Audiencia de Lleida, ha reconocido ser el autor de la agresión pero ha dicho que lo hizo "sin querer". "Le hice daño a mi madre, pero no quería. Yo lo amo|estimo mucho", ha repetido en varias ocasiones. La defensa se ha adherido a la petición de la Fiscalía.
Los hechos tuvieron lugar el 5 de agosto del año pasado cuando el acusado estaba en casa y al llegar su madre le preguntó dónde estaba su hermana. La mujer le contestó que había muerto al nacer, hacía 25 años y él, sin decir nada, la cogió por la cabeza y le hizo un corte en la garganta con un cuchillo acusándola de ser responsable de la muerte de la hermana.
Aunque la Fiscalía pedía inicialmente 4 años de prisión para el hombre por un delito de intento de asesinato y un posterior ingreso en un centro psiquiátrico y libertad vigilada, finalmente ha aceptado pedir que se le aplique la eximente completa de enfermedad mental y por lo tanto exento de responsabilidad. Sin embargo, lo considera igualmente autor de un delito de intento de asesinato y por este motivo pide que se lo interne en un módulo psiquiátrico de un centro penitenciario durante un máximo de 14 años y medio y que se le impongan 10 años de libertad vigilada cuando salga.
Tanto la madre como la hermana del acusado, que han declarado en el juicio, han reconocido que el hombre necesitaba medicación pero que no se la tomaba y que, desde que está ingresado en el módulo psiquiátrico de Brians, "está bien". Ninguna de las dos ha querido responsabilizar al hombre de la agresión y ya intentaron protegerlo en el momento de los hechos ya que, al llegar el SEM y posteriormente la Guardia Urbana, la versión que explicaron fue que la mujer se había cortado la garganta accidentalmente mientras cocinaba.
Un agente de la Guardia Urbana que sabe árabe: la clave para saber quién lo hizo
Por el tipo de herida, ni al SEM ni a la Guardia Urbana les encajaba la explicación de la familia que se trataba de una herida accidental. Uno de los agentes de la Guardia Urbana que se desplazó hasta el domicilio el día de los hechos, fue la clave| para saber qué había pasado. El agente, que sabe árabe, ha declarado este miércoles en el juicio y ha explicado que, cuando la madre estaba a punto de marcharse con la ambulancia hacia el hospital, la hija le dijo en árabe: "tranquila madre, no diré que te lo ha hecho mi hermano".
A raíz de esta declaración se decidió detener al hombre, que fue trasladado al hospital, donde sufrió otro brote, y los médicos concluyeron que sufría una enfermedad mental.