El Govern prepara una ley para regular las formas alternativas de alquiler
La nueva norma afectará a los hogares compartidos, las habitaciones, el renting y los locales de negocios
El Consejo Ejecutivo ha aprobado este martes la memoria preliminar de un nuevo anteproyecto de ley de arrendamientos de bienes que afectará tanto a viviendas como locales comerciales y formas alternativas de arrendamiento. La intención del Govern es incorporar la nueva normativa al libro sexto del Código Civil de Catalunya para dotarlo de una "regulación íntegra y completa de los arrendamientos de bienes y de sus principales modalidades contractuales". Así, regulará residencias habituales, hogares compartidos, habitaciones, segundas residencias o de temporada, locales de negocio, el renting y el cotrabajo.
El objetivo de la futura ley es dar respuesta a la falta de arrendamientos de residencia habitual y la escasa oferta de alquiler social, por una parte, y al mismo tiempo incentivar la oferta de inmuebles para alquilar. El texto aprobado por el ejecutivo catalán quiere reforzar las garantías de todas las partes implicadas y hacer el mercado de alquiler "más seguro, estable y socialmente más equitativo".
Así, se protegerá al inquilino sin que el propietario quede en una posición de debilidad y se establecerán unos plazos de duración "lo suficientemente amplios" como para evitar inseguridad de las partes. También se regularán las prórrogas del contrato y deja en manos de las partes el pacto sobre el precio. Sin embargo, tendrá en cuenta el decreto ley de medidas urgentes para estimular la vivienda de promoción oficial y los arrendadores no podrán repercutir en los arrendatarios los gastos no pactados en el contrato.
La memoria preliminar tramitada hoy también prevé dar un trato diferenciado al inquilino según si el propietario es una persona física o jurídica, incorporar la granja urbana y regular el derecho de tanteo y retracto estipulado en el contrato. Asimismo, se quiere incorporar una regla que garantice la equidad entre las partes cuando el inquilino se encuentre, por una situación sobrevenida o en una posición de inferioridad respecto del arrendatario. Es el caso, por ejemplo, de los negocios que no pudieron hacer frente a los gastos del alquiler por las restricciones decretadas por la pandemia de covid-19.
Locales de negocio y de consumo
El texto quiere regular también el arrendamiento de los locales de negocio ante la falta de regulación actual, ya que el Govern cree que no tiene en cuenta las singularidades de fórmulas como el cotrabajo y el renting. La futura ley prevé incluir incluir el contrato de arrendamiento de consumo con el objetivo de hacer frente a los problemas de desequilibrio entre las partes quanqui alquila es una empresa inmobiliaria y el inquilino es un particular.