Juvillà dice en el TSJC que la orden de retirar los lazos vulneraba su libertad ideológica

El secretario tercero de la Mesa del Parlament y exconcejal de la CUP en Lleida, Pau Juvillà, ha asegurado este lunes durante el juicio contra él que la formación no retiró la simbología independentista de los despachos municipales en la Paeria porque la orden de la junta electoral vulneraba su libertad ideológica.

En su declaración ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), Juvillà ha dicho que la asamblea local decidió no "autocensurarse y no sacar "símbolos que no son partidistas, sino ampliamente compartidos", como lazos amarillos y esteladas. La fiscalía le pide 8 meses de inhabilitación y 1.440 euros de multa por desobedecer a la junta electoral marzo de 2019.

Juvillà ha dicho que los tres requerimientos que recibió los tomó como si fueran dirigidos a todo el grupo municipal, y no sólo a él, que era el presidente. De hecho, el primer requerimiento llegó a nombre de Francesc Gabarrell. La asamblea local decidió recurrir todos los requerimientos y no los obedeció porque, entre otros motivos, su propio logotipo del partido tiene una estelada. Además, Juvillà ha recordado que los lazos estaban colgados desde octubre o noviembre de 2017, cuando encarcelaron a Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, y en las elecciones catalanas de diciembre de 2017 no recibieron ningún requerimiento para retirarlos. En cambio, en las elecciones estatales de abril de 2019 la CUP no se presentó, pero sí que recibieron el requerimiento.

Los requerimientos de la junta electoral llegaron después de la denuncia de la concejala de Cs Ángeles Ribes contra todos los grupos municipales independentistas. Juvillà cree que Cs denunció a los grupos y no a la institución porque tenía un pacto de gobierno 'de facto' con el PSC y no quería que el alcalde, Àngel Ros, "pagara el coste político" de tener que ordenar la retirada de los lazos amarillos y esteladas. Ribes ha dicho que eso no era cierto.

Según Juvillà, a los despachos de los grupos municipales tenían acceso los servicios técnicos y de limpieza municipales y la Policía Local. No obstante, antes de resolverse el recurso contra el tercero requerimientos, los Mossos d'Esquadra entraron en las dependencias municipales de la CUP y retiraron la simbología independentista. Dos de los mossos encargados de la retirada han explicado que entraron en el despacho de la CUP cuando no había nadie, y con una llave facilitada por el consistorio.

En su informe final, la fiscalía ha recordado la última jurisprudencia del mismo TSJC y del Tribunal Supremo por los delitos de desobediencia contra resoluciones de la junta electoral, como en el caso del expresidente de la Generalitat Quim Torra por no retirar una pancarta a favor de los políticos presos del balcón de la plaza Sant Jaume. También ha recordado que Juvillà expresó en Twitter y en la prensa que desobedecería la resolución.

Por su parte, la defensa ha pedido la absolución alegando que el requerimiento se hizo al grupo municipal, no a Juvillà específicamente, y que se hizo en un periodo que no había campaña electoral en la cual se presentara la CUP.

Para acabar el juicio, Juvillà ha hecho uso de su derecho al último turno de palabra, donde ha dicho que la CUP decidió respetar lo que es justo, y no la ley. Por eso, considera que no se puede limitar la libertad ideológica de cantantes, que los catalanes puedan decidir su futuro, y que los diputados y partidos puedan debatir de todo en el Parlament y defender su ideología de forma clara.