El Govern aprueba el pase Covid para la restauración, residencias y gimnasios

El Govern pedirá hoy al Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) aplicar el uso del certificado Covid –indica si una persona esta vacunada, tiene una prueba negativa reciente o ha pasado la infección en los últimos seis meses– en el interior de los restaurantes y bares, gimnasios y para acceder a los geriátricos, aunque en este último caso a los visitantes no vacunados se les hará un test de antígenos. Ante el aumento de la incidencia del virus y para evitar una sobrecarga del sistema sanitario, el Govern ha decidido implementar el certificado Covid antes que restringir horarios o aforos, pero primero necesitará el aval del TSJC.

Si le da luz verde, entrará en vigor este viernes y tendrá una vigencia de 14 días. Actualmente, los tribunales ya lo permiten en el ocio nocturno y en banquetes con baile en interiores, ya que considera que el beneficio de su apertura es superior al pequeño recorte de libertades que comporta el certificado. Se puede obtener desde La Meva Salut.

La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, remarcó que el certificado no obliga a la vacunación, ya que también se puede acreditar la no infección con una PCR o un test de antígenos. Añadió que la medida se toma tras constatar que la pandemia tiene una tendencia al alza “preocupante” y no descartó que más adelante se amplíe a cines, teatros o grandes estadios como propone el comité asesor. Plaja afirmó que la incidencia es “muy alta” en los menores de 12 años y también entre en las franjas de 30 a 49 años.El secretario general de la Federación de Hostelería de Lleida, Ramon Solsona, dijo que sería deseable no tener que aplicar el certificado, “pero mejor esto que otras restricciones” y recordó que en enero ya lo pidieron.

Cree que no afectará a la afluencia de clientes, ya que la mayoría de la población está vacunada, aunque dijo que será “una molestia” para algunos tener que descargarlo. Al respecto, algunos trabajadores de bares de Lleida creen que tendrán menos clientes por este motivo. Otros señalaron que “no tiene sentido” aplicarlo en un restaurante “con todas las distancias” y “luego ir a una gran superficie llena de personas por los descuentos del Black Friday” y lamentaron “el coste extra” de personal que supondrá.Desde la Associació Catalana de Recursos Assistencials, valoraron positivamente que se pida el certificado a los visitantes de residencias, “ya que servirá para proteger todavía más a uno de los colectivos más vulnerables y que más afectados se han visto por la pandemia”.

Aun así, también pide que se exija a los trabajadores, aunque el 93,6% de los de Lleida tienen la pauta completa.A las puertas del puente de la Purísima y a un mes de la Navidad, cuando crece la interacción social, el Govern recuerda que las evidencias científicas corroboran que la Covid se transmite principalmente en ambientes poco ventilados, es decir, en espacios interiores, donde la gente no lleva mascarilla y donde no se puede mantener la distancia mínima de un metro y medio.