Temor mundial a una nueva cepa

La detección de una nueva cepa del coronavirus en Sudáfrica, identificada como B.1.1.529, preocupa a la comunidad científica porque presenta una amalgama de más de 30 mutaciones que, si bien algunas ya se habían observado en otras variantes, como la beta, esta es la primera vez que se ven juntas. Esto es lo que ha provocado que esté bajo vigilancia y que se le otorgue el potencial de mayor transmisibilidad y capacidad de evadir la inmunidad o protección previa. No obstante, expertos señalan que aún es pronto para saber su impacto.

El presidente de la empresa catalana Hipra, David Nogareda, aseguró que si esta cepa termina siendo la predominante necesitarían unos 4 meses para modificar su vacuna, que está en estudio. La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) consideró “prematuro” prever si se necesitará adaptar las vacunas “con una composición diferente” para hacer frente a esta variante emergente. La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció que “se ha detectado a un ritmo más rápido que en anteriores surgimientos en el número de infecciones, lo que podría indicar que tiene ventaja a la hora de propagarse”.

El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) calificó a esta variante como “de interés” y advirtió de que su transmisibilidad es “muy alta”. Tras conocerse la nueva cepa de la Covid, los países de la Unión Europea acordaron suspender los vuelos a siete países del sur de África. Se trata de Sudáfrica, Lesotho, Botswana, Zimbabwe, Mozambique, Namibia y Eswatini. Mientras, el ministerio de Sanidad español propondrá en el próximo Consejo de Ministros un acuerdo para la restricción de vuelos procedentes de Sudáfrica y Botswana.

El ministerio avanzó que adoptará “con carácter inminente” una resolución para exigir a aquellos pasajeros que provengan de países de riesgo, además de la vacunación, una prueba de antígenos o PCR. La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, no descartó que “durante estos días” se puedan tomar medidas de control para los vuelos procedentes de Sudáfrica. Ante esta nueva ola de restricciones, el ministro de Salud de Sudáfrica, Joe Phaahla, recalcó que ve “injustificada”, “contraproducente” y “draconiana” la reacción aplicada por otros países tras la detección de la variante. El primer caso de la nueva cepa en Europa se confirmó en Bélgica.

Las autoridades sanitarias de este país lo detectaron el lunes. Se trata de una mujer adulta joven no vacunada que desarrolló síntomas once días después de viajar a Egipto a través de Turquía y que aseguró no haber tenido contacto con personas del sur de África. Además de Bélgica, hasta ahora, se han confirmado casos de esta variante en Sudáfrica, Hong Kong, Botswana e Israel. A nivel económico, la variante, bautizada como Omicron por la OMS aunque también se le denomina Nu, provocó también una caída del Ibex 35 de casi el 5%.