La abstención del Comú frena la aprobación del presupuesto de la Paeria de Lleida
Miquel Pueyo convocará un pleno en enero para debatir una cuestión de confianza vinculada a la aprobación de las cuentas
Los grupos en la oposición han tumbado la aprobación del presupuesto 2022 del gobierno de la Paeria, en minoría de ERC y JxCat. Aunque el antiguo socio de gobierno del Comú de Lleida había pactado hace unas semanas el visto bueno en las cuentas, los dos concejales de la formación se han abstenido en el pleno extraordinario de este viernes y por eso no han podido prosperar ya que PSC, PP y los concejales no adscritos han votado en contra.
Pueyo ha lamentado que el jueves se fueron a dormir con la previsión de que el acuerdo anunciado hace unas semanas entre el gobierno municipal y el Comú se ratificaría en el pleno de este viernes pero finalmente, a primera hora ha saltado la noticia que no sería así. En este sentido, el alcalde ha puesto de manifiesto el "momento trascendental" que supone la aprobación de un presupuesto como el de 2022 y ha pedido a la oposición que mediten y reflexionen sobre la decisión tomada.
Ante el "bloqueo temporal", Pueyo ha adelantado que después de Reyes convocará un pleno donde se debatirá una cuestión de confianza a la alcaldía vinculada a la aprobación de las cuentas. Ha instado a la oposición, de quien ha dicho que es "heterogénea y con discrepancias en los comportamientos a la hora de votar" a meditar, en el plazo de un mes si deciden "descabalgar" a la alcaldía y escoger un nuevo alcalde o alcaldesa.
La asamblea del Comú de Lleida ha valorado que, aunque la propuesta de presupuesto incorpora medidas acordadas con la formación, los compromisos que acompañan a estas partidas presupuestarias no tienen suficientes garantías de cumplimiento. En este sentido, han recordado que después de la presentación del acuerdo, ya advirtieron que habían constatado que el gobierno municipal no había asumido estos compromisos políticos fundamentados al dar continuidad a políticas de transformación que ya figuraban en el Pacto de Entendimiento.
Según la concejala Elena Ferre, entre la firma del acuerdo de presupuestos y este viernes, han visto que en políticas de participación se ha vuelto al viejo modelo donde se pierde el papel de los consejos de zona, formas presidencialistas con escasa participación real, y que se ha desvirtuado el proyecto de dinamización comunitaria como vía de actuación en los barrios con mayor problemática social y económica.
El Comú de Lleida había pedido un relevo y reorganización de la concejalía de Participación como medida para, más allá de las buenas palabras, garantizar que no se "desmantelara" el trabajo hecho en el primer tramo del mandato y que formaba parte del plan de acción municipal de entendimiento. En una reunión mantenida con el alcalde Pueyo, afirman que aunque se prometieron algunos cambios y se manifestó la voluntad de mejora, se constató que el gobierno no tenía claro al modelo de participación como "pieza clave" de un modelo de gobierno abierto.
Por otra parte, la asamblea del Comú también ha valorado que en el ámbito de la participación se ha puesto en evidencia una falta de compromiso con el "cambio real" que ya venía manifestándose también en las políticas de movilidad. El Comú añade que en la reunión mantenida con Pueyo, constataron que más allá de las palabras de buenas intenciones ya escuchadas otras veces, el equipo de gobierno no estaba dispuesto a asumir con hechos el "necesario impulso que requiere el proyecto de cambio" plasmado en el pacto y que la formación dice que quería recuperar con sus aportaciones al presupuesto.
El 25 de noviembre el gobierno de la Paeria y el Comú cerraron un acuerdo para el presupuesto 2022, calificado como el más elevado de la historia del ayuntamiento con 196,1 millones de euros, un 17% más que el actual. El objetivo de las cuentas planteaba un avance en la transformación y la reactivación de la ciudad y, en este sentido, se incluía una inversión de 25,3 millones, cifra que multiplicaría por más de 8 la presupuestada para este año. Esta, eso si, estaría condicionada a la obtención de 15,5 millones provenientes de los fondos Next Generation UE, y a transferencias de otras administraciones.