La falta de presupuesto pone en peligro captar fondos europeos

La no aprobación del presupuesto de la Paeria para el 2022 puede hacer peligrar que la ciudad reciba fondos europeos como los Next Generation. Esto se debe a que en el documento de cuentas del año que viene está contemplada la inversión que podría llegar de Europa, valorada en unos 16,5 millones de euros, motivo por el que el alcalde, Miquel Pueyo, optó el viernes por someterse a una cuestión de confianza tras no poder aprobar el presupuesto en lugar de prorrogar las cuentas de 2021, que no contemplan ninguna inversión de Europa. En el caso de que el pleno avale su gestión, automáticamente se aprobarían las cuentas, pero, si esto no ocurriera, la oposición tendría un mes para una moción de censura.

Si esta no prosperara, Pueyo y el presupuesto quedarían ratificados. No obstante, en el caso de que se llegara a este último escenario, las cuentas no se aprobarían hasta febrero. La no aprobación del presupuesto se produce a raíz de que PSC, PP y los ediles no adscritos votaran en contra y el Comú, antiguo socio de gobierno de ERC y Junts, se desmarcara a última hora y se abstuviera, rompiendo así el pacto que firmó hace tres semanas en el que se comprometía a respaldar las cuentas.

El equipo de gobierno aseguró ayer que no se plantea “de ninguna de las maneras” que la ciudad no pueda recibir los fondos europeos, ya que “Lleida no puede permitirse este escenario”. En este sentido, reconoce que recibirlos “evidentemente pasa por tener presupuesto para el 2022 y estamos convencidos que al final lo tendremos”. A su vez, aseguran que el primer paquete de proyectos que presentaron para optar a los fondos Next Generation, como crear una zona de bajas emisiones en Ronda o renovar los parquímetros, “han sido admitidos provisionalmente”, lo que podrá suponer un impacto “de más de 16 millones de euros”.

Precisamente, el Estado anunció ayer que los municipios de más de 50.000 habitantes pueden optar a otro paquete de ayudas de 92,77 millones centradas en la digitalización y modernización.Paralelamente, ayer la sección local de ERC mostró su apoyo a Pueyo y acusó al Comú de haber cometido “una grave irresponsabilidad política” al no apoyar las cuentas y esto “afectará a la confianza para futuras negociaciones”. Sobre la cuestión de confianza al alcalde, el jefe de la oposición, el socialista Fèlix Larrosa, dijo que “estamos a la espera de que nos llame, si quiere, Esquerra para hablar. Ellos tienen el lío y ellos deben resolverlo”, zanjó.

Por su parte, el portavoz del PP, Xavi Palau, pidió actuar “con sentido de ciudad”, pero dejó claro que “los socios preferentes del gobierno son el Comú y el PSC, no nosotros, y entendemos que es con ellos con quien debe negociar primero”.