EQUIPAMIENTOS SOSTENIBILIDAD
La ciudad tendrá nueva 'deixalleria' en 2023 y será cinco veces más grande que la actual
Costará algo más de un millón que sufragará casi en su totalidad la Agència Catalana de Residus || Estará cerca de Magraners, tendrá zonas verdes, aula educativa y tienda de objetos de segunda mano
La ciudad tendrá una nueva ‘deixalleria’ municipal ubicada entre el polígono Neoparc y la carretera de Tarragona, abrirá en diciembre de 2023 y será cinco veces más grande que la actual en Pardinyes. Así lo aseguró ayer el alcalde, Miquel Pueyo, en la presentación del futuro equipamiento, que se ubicará en un solar municipal de 5.000 metros cuadrados en la calle Vilanova de la Barca, próxima al barrio de Magraners. El coste de su construcción será de 1.073.510,97 euros, de los cuales 994.535,36 los aportará la Agència Catalana de Residus.
Pueyo detalló que “ya habíamos presentado dos proyectos previos a este para contar con la financiación de la Agència y finalmente a la tercera nos han concedido esta ayuda que servirá para hacer una deixalleria más grande, que generará cero molestias a los vecinos al estar en un polígono y que contará con zonas verdes y varios servicios para la ciudadanía”. Estos serán desde una aula educativa “para que los niños de la ciudad puedan visitarla y ver cómo se tratan y reciclan los residuos”, hasta una tienda en la que se venderán objetos de segunda mano que han llegado a la ‘deixalleria’. Un servicio que ya ofrecen algunas del Pirineo, como por ejemplo la de La Seu d’Urgell y la de Sort.
El alcalde detalló que será “grande, pensada para una ciudad de ente 150.000 y 200.000 habitantes, por lo que podrá asumir el volumen de residuos que genera Lleida ahora y en los próximos años, se prevé que sea más urbana que industrial y, a medida que vayan acabando las obras, se irán trasladando los servicios desde la de Pardinyes al polígono”. Cabe recordar que la actual ‘deixalleria’ entró en funcionamiento en 1998 y está junto a las oficinas de la empresa concesionaria de limpieza, Ilnet, pero tanto Pueyo como el concejal de Transición Ecológica, Jaume Rutllant, reconocieron que se había quedado obsoleta. “Debido al crecimiento de la ciudad y a las nuevas necesidades de reciclaje, la planta actual se ha quedado pequeña y no dispone del espacio suficiente para desarrollar las funciones que hoy en día se necesitan”, dijo Rutllant.
Puso como ejemplo el tratamiento de residuos, su reciclaje y el aprovechamiento de productos si es posible. Pueyo añadió que la nueva ‘deixalleria’ también se adaptará para la recogida y tratamiento de amianto, algo que la de Pardinyes no ofrece.