El Castillo de Gardeny recibe a 8.323 visitantes en el 2021, la gran mayoría a título individual

El Castillo de los Templarios de Gardeny ha cerrado el año 2021 con un balance de 8.323 visitantes, de los cuales, el 90% lo han hecho a título individual ya que los grupos han sido escasos y reducidos. Desde la Concejalía de Lleida consideran que el espacio tiene potencial para la realización de acontecimientos culturales, solidarios y de empresas de pequeño formato. De hecho, ha acogido más de una trigésima el último año, especialmente los meses de verano, donde se registró un récord histórico de visitantes, además de los asistentes al ciclo Noches del Templo. Todo, consolida este equipamiento como el segundo reclamo turístico de la ciudad, sólo por detrás de la Colina de la Seu Vella. La Concejalía también destaca el trabajo hecho de de la Oficina de Turismo para darlo a conocer.

El perfil de los visitants

La mayoría de los visitantes que se interesan por el Castillo de los Templarios de Gardeny proceden de Catalunya y del resto del Estado español. Destacan a los visitantes procedentes de Barcelona, Madrid, Valencia, Aragón y Bilbao, los cuales han conocido el equipamiento a través de la Oficina de Turismo de Lleida, las redes sociales y la página web.

Así, la Oficina de Turismo acostumbra a ser el primer contacto del visitante que se interesa por conocer los tesoros patrimoniales de la ciudad. El descubrimiento de un equipamiento poco conocido, el misterio que rodea la orden del Templo, las facilidades para acceder a la colina de Gardeny y el acogimiento de los guías del Castillo para facilitar la visita hacen que el resultado del visitante sea satisfactorio en todas las encuestas de valoración, señala la Concejalía.

Nuevas perspectivas

La Oficina de Turismo de Lleida trabaja en nuevos proyectos para promocionar el potencial turístico del equipamiento medieval, que este año celebrará el 15.º aniversario de su apertura al público. Entre las iniciativas destacan la realización de un 'mapping' de las pinturas de la Iglesia de Santa Maria de Gardeny y la restauración de la fachada principal de este templo.

La intervención en la fachada es de tipo conservativo y permitirá alcanzar la debida estabilización de los materiales constitutivos y garantizar la correcta conservación del conjunto. Con el objetivo de evitar las retenciones y filtraciones de agua en la superficie perimetral del portalón, los trabajos contemplan la ejecución de diferentes procesos de restauración a lo largo de la superficie contigua al perímetro de la obra, en un área próxima a los 20 metros cuadrados correspondiendo a los sillares regulares del menaje de la iglesia, el cual presenta un estado de conservación precario.

Por otra parte, la propuesta del 'mapping' de las pinturas murales tiene que permitir consolidar y potenciar una de las joyas artísticas del complejo medieval, ya que estos restos pictóricos del siglo XIII son los únicos ejemplares de la época templera que se conservan a Catalunya y de los pocos existentes en Europa.