Más alumnos y docentes confinados

La incidencia de la Covid en los centros educativos sigue desbocada con un nuevo récord de 5.443 personas confinadas, según datos de Educación, de los cuales 4.973 son alumnos y 470, docentes. El gran número de bajas entre el profesorado ha comportado que el departamento programe nombramientos de sustitutos cada día, pero según el sindicato USTEC-STEs en la provincia de Lleida ayer quedaron vacantes el 60% en Primaria y el 43% en Secundaria, sobre todo plazas correspondientes a tercios de jornada u otras reducciones. Algunas especialidades que quedaron sin sustitutos fueron tecnología, matemáticas, física y química y latín y griego, algunas de ellas en la capital.

CCOO, por su parte, calificó la situación en los centros de “hecatombe” y reclamó mascarillas FFP2 para los docentes, reducir ratios y más personal para desdoblar clases. Educación ha nombrado a 217 sustitutos en Lleida desde el pasado día 10, más de 8.000 en toda Catalunya. El conseller de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, anunció en en RAC1 que autorizan que los profesores de Secundaria puedan dar clases en Primaria en la concertada y centros municipales, negó que haya “descontrol” y afirmó que “no peligra el cierre de escuelas”.

Aseguró que las previsiones que manejan con Salud determinan que es muy posible que a mediados o finales de la semana que viene empiecen a bajar los casos. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ve “inevitable” la situación que viven los centros. Dijo que “un aumento exponencial de casos ha tensado el sistema y se pueden haber producido algunos cuellos de botella y retrasos en las respuestas de los centros educativos pero estamos trabajando para enmendarlo lo más pronto posible”.

En otro orden, familias de Lleida con hijos en Secundaria, con el apoyo de CGT, presentaron ayer quejas ante Educación en las que denuncian que el protocolo por casos de Covid en las aulas “discrimina” a los que no se han vacunado porque se tienen de confinar “sin darles opción a hacerse un test o demostrar que están sanos”. “Se está vulnerando su derecho a la enseñanza”, critican.