LLEIDA
Alumnos 'investigadores' de la Covid
El instituto Torre Vicens de la ciudad de Lleida es el único de la provincia que participa en el proyecto Escuelas Centinelas, que impulsan los departamentos de Salud y Educación para conocer el impacto de la Covid-19 en los centros educativos. En toda Catalunya son 26 y los propios alumnos se convierten en cierta manera en investigadores, puesto que son los encargados de anotar periódicamente (cada veinte minutos) los datos que ofrecen los sensores instalados en ocho aulas sobre la concentración de CO2 , la humedad relativa y la temperatura, así como el número de alumnos y docentes en el aula y si hay ventilación para determinar el nivel de exposición al virus de estudiantes y personal docente. Y es que cuanto mayor es la concentración de CO2 en las clases, más posibilidades de transmision del coronavirus y de contagios en el aula.
En abril o mayo está previsto repetir la actividad para tener datos de las mismas aulas en dos momentos distintos y poder compararlos. Gisela Bentoldrà, de segundo de ESO, es una de las alumnas que participa en el proyecto, que considera “interesante”. Explica que durante toda esta semana se turnan para apuntar las mediciones y los profesores consideran que esa actividad les motiva y les hace sentir más responsables.
Los datos obtenidos serán trabajados también en clase en distintas asignaturas y etapas educativas (ESO, Bachillerato y ciclos de FP), indicó la directora del instituto Chus Castro. En total, participan unos 240 estudiantes y la directora espera que su implicación en el programa sirva para que tomen más consciencia de la importancia de las medidas de prevención, “como colocarse la mascarilla correctamente, y no por debajo de la nariz”.El instituto comenzó el proyecto de Escuelas Centinela al inicio del curso con una encuesta a alumnos y docentes sobre sus actitudes y conductas respecto a la Covid, previo consentimiento informado de las familias o los propios estudiantes si son mayores de 16 años. Está previsto repetirla de nuevo a final de curso para comprobar si se han modificado o no algunos hábitos.Otra parte destacada del proyecto es el estudio del impacto de la pandemia en la salud mental.
Para ello los profesores recibirán una formación específica y después hasta final de curso programarán actividades con los alumnos en el aula y algunas también en casa con sus familias. Como colofón, está previsto organizar en junio un congreso en el que participarán los 26 centros educativos implicados, que compartirán los datos obtenidos. La información servirá de base a los expertos para diseñar políticas de prevención y control de la transmision del virus en el ámbito educativo
Los datos recabados por los propios estudiantes a través de unos sensores se trabajarán en clase