Suspensos más edulcorados

La conselleria de Educación prevé calificar los suspensos en Primaria y ESO como En Procés d’Assoliment (EPA) en vez del actual No Assoliment (NA), según consta en el borrador del decreto de Currículums. El resto de calificaciones que recibirán las familias y el alumnado serán Assoliment Excel·lent (AE), Assoliment Notable (AN) y Assoliment Satisfactori (AS), igual que ahora. El departamento sustituyó las calificaciones numéricas del 0 al 10 por esta nomenclatura en 2016 en Primaria y en 2018 en Secundaria.

El borrador también dispone que en las actas oficiales de evaluación de fin de curso de segundo, cuarto, sexto de Primaria y de final de ESO, “para adecuarse al resto del Estado”, las calificaciones deberán seguir siendo Excelente, Notable, Bien, Suficiente e Insuficiente, y especifica que En Procés d’Assoliment equivale a esta última Asimismo el Govern sigue manteniendo que se pueda aprobar ESO con algún suspenso “si de forma colegiada el equipo docente considera que no será impedimento para la continuidad formativa”. Varios directores de centros de Primaria y de Secundaria de Lleida consultados creen que la calificación de En Procés d’Assoliment es un “eufemismo”. “Es un eufemismo para disfrazar la realidad.

A nadie le gusta que le digan que no lo la conseguido o que ha suspendido”, indicó la directora de una escuela, y consideró que “falta rigor”. El director de un instituto lo valoró “muy negativamente”. “Las cosas se han de decir por su nombre y las estamos tapando con eufemismos para no decir que no lo ha logrado.

Si no tenemos claro dónde fallamos, no podemos mejorar. Es una manera de disimular el posible fracaso escolar”, señaló. Un tercero lo ve una cuestión de “estética”.Otros, en cambio, quitan hierro al asunto.

“No dejan de ser manera de decir las cosas. En el fondo el significado es el mismo”, dijo un director de colegio. Argumentó que “desde el punto de vista competencial, el concepto en procés deja abierto un espacio de tiempo más amplio para lograr el objetivo” y añadió que “es menos agresivo para el alumno, aunque ha de entender que tendrá que continuar insistiendo en su logro”.

La directora de un instituto defiende que la expresión En Procés d’Assoliment en la evaluación de los alumnos “denota que no queda cerrada, es continua y hemos de seguir trabajando para conseguir el logro efectivo de la competencia”. Además, remarca que el decreto especifica claramente que equivale a insuficiente.El borrador de decreto también determina que se eliminarán las notas trimestrales y serán sustituidas por informes de seguimiento. Además, tiene en cuenta la perspectiva de género en las asignaturas, por ejemplo en el estudio de la historia, el arte, la ética de la comunicación y la literatura.

También se incluye la cultura de la paz, la emergencia climática y el fomento de una conciencia crítica.

Aprendizaje de lenguas según el entorno de los centros

El decreto prevé que los centros determinen los criterios para organizar el aprendizaje de lenguas según la composición lingüística de su alumnado y del entorno, “en el marco de la autonomía de los centros”, cediéndoles la gestión de un porcentaje de horas. La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, desvincula este decreto del cumplimiento de la sentencia del 25%.

En este sentido, mostró la satisfacción del Govern por el archivo de la Fiscalía de las denuncias interpuestas por entidades a favor de la educación bilingüe contra el president Pere Aragonès, y el conseller de Educación, Josep González Cambray.

La “emancipación nacional” en Catalunya se estudiará en ESO

El texto prevé en tercero y cuarto de ESO identificar, en Ciencias Sociales, “las luchas y movimientos sociales y de emancipación nacional” en la Catalunya y España contemporáneas. Incorpora el “reconocimiento del concepto plurinacional del Estado y de la necesidad de preservación de las lenguas y las culturas propias como fuente de riqueza compartida”.

“Es necesario hacer emerger en el alumnado la conciencia de pertenencia lingüística y potenciar” el uso del catalán, indica. En historia, se propone identificar colectivos “sometidos, silenciados e invisibilizados” hasta el presente.