TRÁFICO SEGURIDAD
Los accidentes con patinetes se cuadruplican desde 2019
Según datos de la Urbana, hubo 18 ese año y 74 en 2021 || Estos vehículos proliferan y estiman que ya hay entre 1.500 y 3.000
El número de accidentes en la capital en los que está implicado un patinete eléctrico se han multiplicado por cuatro desde 2019, según los datos de la Guardia Urbana. En concreto, ese año se registraron 18 siniestros con vehículos de movilidad personal (VMP) involucrados, en 2020 se elevaron a 37 y en 2021, a 74. La Urbana también atribuye a la implicación de los patinetes el incremento de los atropellos.
El año pasado fueron 83 con 66 heridos, mientras que en 2020 habían sido 58 con 51 y en 2019, 61 con 60. Asimismo, en 2021 fueron sancionados 593 conductores de patinetes, la mayoría por no llevar casco o bien circular por lugares prohibidos (las aceras, por ejemplo). Gerard Valentines, presidente de VMP Lleida, recordó que en los últimos años ha proliferado el uso de patinetes en la ciudad, de los que ya hay entre 1.500 y 3.000, y solo se ha registrado un accidente grave, en el que desafortunadamente murió una mujer.
Apuntó que cuando se permitió la circulación de patinetes por la calzada “todo el mundo creía que habría más accidentes” de los que realmente han ocurrido y defendió que con la nueva normativa “se ha reforzado la seguridad”. Añadió también que la Paeria está llevando a cabo campañas de sensibilización de la normativa relativa a los vehículos de movilidad personal.Por otra parte, el grupo municipal del PSC reclamó en la comisión de Seguridad y Civismo de ayer más vigilancia en el entorno de la Seu Vella. La edil Cristina Morón manifestó que en la reunión “se ha reconocido que el Centro Histórico y los alrededores de la Seu Vella sufren problemas de inseguridad, con robos en coches, algunos en el aparcamiento del monumento, por lo que instamos al señor Pueyo a incrementar las patrullas de la Guardia Urbana”.
Aseguró que han recibido “avisos de vecinos sobre hurtos que se producen en diversos puntos de Lleida” y por ello piden “que se destinen los recursos necesarios para plasmar una sensación de seguridad, que es un derecho de los leridanos”.