Convenio para que Llívia deje de verter al río Segre

La Paeria está llevando a cabo las obras de la primera fase de mejora del alcantarillado de Llívia con la sustitución de una tubería paralela al camino de la Creu de Basella, aumentando su capacidad y dándole más pendiente para que pueda evacuar más agua. Esta fase, que cuesta 196.000 euros y corre a cargo de Aigües de Lleida, se completará con una segunda para renovar el colector de la calle Antoni Vilaplana y una tercera en la calle Gran. El alcalde, Miquel Pueyo, y el primer teniente de alcalde, Toni Postius, anunciaron que próximamente la Paeria firmará un convenio con la Agència Catalana de l’Aigua para que esta asuma la obra de conectar el colector general de Llívia con la red de alcantarillado de la ciudad, para que las aguas residuales acaben en la depuradora.

Ahora, desembocan en una acequia que va a parar directamente al río Segre.