El Archivo Municipal de Lleida incorpora 5.000 fotografías sobre el cambio urbanístico del 2002 al 2007

El Archivo Municipal de Lleida incorpora a su fondo la donación que ha hecho la familia Nasarre-Sanz de más de 5.000 fotografías que describen el cambio urbanístico en la ciudad entre los años 2002 y 2007. El fondo Nasarre es el legado que ha dejado el leridano Marciano Nasarre Pena con las imágenes tomadas con su cámara. Tiene un valor especial en tanto que las fotografías muestran en reportajes breves la evolución del edificio, desde que está de pie y se derriba por las grúas, hasta el seguimiento de los restos arqueológicos que se pudieran encontrar y el levantamiento del nuevo edificio. Cada reportaje recorre el cambio que experimentaba la zona que fotografía. Las imágenes están, casi todas, en papel positivo, y las ha donado su viuda Juana Sanz Cabañes.

La jefa del Servicio de Archivo y Gestión de Documentos de la Paeria, Iolanda Enjuanes, ha explicado que las fotografías adquieren el valor para estar dispuesto y conservado en el Archivo Municipal, para formar parte del patrimonio histórico de Lleida. Enjuanes ha comentado que es un testimonio gráfico para generaciones posteriores de la transformación urbanística de la ciudad en aquel periodo. El trabajo que realizará a partir de ahora el Archivo consistirá en organizarlo. Así, lo clasificará, ordenará, describirá y digitalizará. También hará difusión para que la ciudadanía lo pueda conocer.

El Archivo Municipal de Lleida agradece la participación que ha tenido en la donación Ernest Céspedes Torregrosa para facilitar el contacto con la familia Nasarre-Sanz y proponer el Archivo como destino de las fotografías para su conservación definitiva.

Marciano Nasarre

Marciano Nasarre Pena (Lleida, 14 de junio de 1934 - Lleida, 8 de agosto del 2018) nació en el número 20 de la calle Magdalena. Muy joven trabajó en una frutería delante de su casa haciendo el reparto de los pedidos. A los 18 años se incorporó en el taller de la calle Anselm Clavé, delante de la ferretería Soler. Con 20 años, empezó a trabajar en empresas relacionadas con grúas, primero como aprendiz, adquiriendo poco a poco más responsabilidades y cargos de dirección. De 1975 en 1982 se trasladó a París para trabajar en la empresa HIAB. Después, se mudó a Madrid, en la empresa Palfinger, hasta que se tuvo que jubilar een 1997 por enfermedad. Aquel año se trasladó a Lleida para instalarse definitivamente.

Su gran afición era la fotografía y viajar. Entre sus fotografías abundan las realizadas en diferentes lugares de la capital del Segrià, sobre todo de derrumbamientos y de construcciones de edificios y de arreglo de calles, seguramente por la relación con su profesión y el mundo de las grúas.