Lleida acoge por primera vez el programa SARA de la Cruz Roja para ayudar a encontrar trabajo a mujeres inmigradas

El programa SARA de la Cruz Roja se desarrolla este año por primera vez en Lleida ciudad y también en Alcarràs. Es una propuesta dirigida a mujeres sin trabajo y principalmente inmigrados con el objetivo de mejorar sus conocimientos para acercarlas al mercado laboral y tengan más posibilidades de acceder a un buen puesto de trabajo.

El curso empezó en noviembre pasado y se alargará hasta junio. Cuenta con una cincuentena de mujeres inscritas y se ha focalizado la formación en la industria agroalimentaria por el elevado volumen de empresas de este sector que hay en Ponent.

La formadora Lidia Major, destaca la "motivación" de las mujeres y el hecho de que con pequeñas cosas que aprenden avanzan "un paso gigante". De las 50 mujeres que participan en el programa, 30 lo hacen en Lleida y 20 en Alcarràs. Según ha explicado el responsable del Área de Empleo y Formación de la Cruz Roja en Lleida, Pedro Ubiergo, se los propuso hacer el programa en Lleida por el elevado número de mujeres que atienden en las circunstancias del perfil que es busca formar. Es decir, mujeres que tienen uno "bajo perfil académico o poca experiencia laboral". Asimismo, también que tienen poco conocimiento de las nuevas tecnologías, y según Ubiergo, estas características son muy comunes en mujeres inmigradas.

Ubiergo señala que una vez acaba el curso del programa se hace un seguimiento a las participantes y también se les ofrece participar en otras acciones para encontrar trabajo. No se descarta que haya continuidad del proyecto, aunque eso dependerá de si llega financiación del Instituto de la Mujer del Ministerio de la Igualdad del gobierno español.

El programa SARA hace unos 15 años que se desarrolla al Estado. Era un proyecto que iba muy dirigido a mejorar las competencias básicas de las participantes y también se profundizaba en aspectos de autoestima y empoderamiento. Ahora se siguen trabajando estos temas pero se ha reforzado mucho el empoderamiento tecnológico.

Este año se está desarrollando también en Huelva, Sevilla, Móstoles y Ejea de los Caballeros.

La formadora del programa, Lídia Major, ha explicado que las mujeres que participan en el programa quieren acercarse al mercado laboral de forma estable después de haber hecho muchos trabajos temporales. La mayoría son madres de familia, con cargas familiares y poca experiencia laboral.

Al curso se las orienta para "encontrar su camino" y alcanzar un objetivo laboral. "Aquí hacemos que hagan grupo y que su red crezca", destaca Major, que también remarca el hecho de que ganan una entidad detrás para ayudarlas en el tema de las ofertas laborales o conocer los recursos que hay en Lleida ciudad para poder mejorar su calidad de vida.

En el caso de Ponent, el programa está especialmente enfocado hacia la industria agroalimentaria por el elevado número de empresas de este sector que hay establecidas. En este sentido, se hace un curso de formación sobre "Operaria en industria agroalimentaria" de 140 horas de duración que incluye prácticas no laborales en empresas.

Según Major, son mujeres que llegan muy motivadas a la formación y cogen la ayuda que se les ofrece con muchas ganas y ánimos. Por eso, destaca que el trabajo que hacen es muy "agradecido" porque todas las pequeñas cosas en que se adelanta, son un gran paso para ellas.

Una de las alumnas, Teresa Urrea, originaria del Ecuador y establecida en el país desde hace 30 años, ha explicado que participa en el curso para capacitarse y conseguir un trabajo para estar bien ubicada laboralmente. "Ahora la vida es muy cara y espero conseguir trabajo", destaca Urrea, que también apunta que ha trabajado en la residencia de Alcarràs durante 4 años y le gusta mucho el sector del cuidado a las personas mayores. No obstante, no se cierra la puerta en otros ámbitos y ahora quiere aprender sobre la manipulación de alimentos con la esperanza que se le abran puertas en el sector de la agroalimentación.