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Subastan el piso de una mujer de Lleida de 87 años por una deuda de sus hijas

No han devuelto un préstamo que avalaron con la vivienda

La afectada, Encarnación Martínez.

La afectada, Encarnación Martínez.Magdalena Altisent

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El piso en el que vive una mujer de 87 años ha salido a subasta a instancias de una entidad bancaria porque sus hijas han dejado de pagar desde hace tres años las cuotas del préstamo hipotecario que avalaron con esta vivienda. Así lo aseguró ayer la afectada, Encarnación Martínez, que detalló que “todo empezó cuando mis hijas pidieron en 2011 un préstamo de 10 millones de pesetas (60.000 euros) y más tarde otro de dos millones (12.000 euros) y luego me enteré que no estaban devolviendo el préstamo y que habían puesto como aval la casa en la que resido en la calle Anselm Clavé desde hace 20 años”.

Explicó que ella y su marido compraron el piso con la indemnización que recibieron por la muerte de un hijo a causa de un accidente laboral en 1998. Su marido falleció hace unos años, y sus hijas son las propietarias, lo que les permitió poner la vivienda como aval para el préstamo, mientras que Encarnación es la usufructuaria. Esta añadió que “hace tres años me enteré que la mayor de mis hijas no quería devolver el préstamo y los responsables de Caixabank iniciaron los trámites judiciales para quedarse con la vivienda”. “Solo pido que me dejen vivir en ella hasta que me muera, queno me echen de la que ha sido mi casa los últimos veinte años y que se pagó con la muerte de mi hijo”, concluyó.

Su abogado, Marc García, dijo que están intentando pactar con la entidad bancaria, pero de momento no se ha llegado a ningún acuerdo y ya se han iniciado los trámites para la ejecución hipotecaria, que es el paso previo para vender o adjudicarse el piso y desahuciar a la mujer. Por su parte, una portavoz de Caixabank señaló que desde el primer momento se ha intentado llegar a un acuerdo con las hijas, pero que una ha rechazado todas las ofertas que les han presentado. Recalcó que “si finalmente el proceso llega a su fin sin lograr un acuerdo y conseguimos la titularidad de la vivienda, esta mujer no se quedará en la calle, le ofreceremos un alquiler social, pero esperamos no llegar a este punto”.

Ante un posible desahucio y sin recursos | Encarnación añadió que, además de la deuda impagada por sus hijas que puede hacer que pierda el piso, no tiene recursos porque su hija mayor fue retirando durante los últimos años los ahorros que tenía en una cuenta bancaria. Su abogado afirmó que este hecho ha sido denunciado por vía penal y critica que la sucursal no la avisara de estos movimientos.

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