SUCESOS TRIBUNALES
Diez condenados a entre uno y cinco años y medio por tráfico de drogas
Una red que fue desarticulada entre mayo y junio de 2020 en el Segrià y L'Hospitalet de Llobregat || La Fiscalía les rebaja la petición de pena y retira los cargos a otro
La Audiencia de Lleida condenó ayer a penas de entre un año y cinco años y medio de prisión a diez acusados por delitos contra la salud pública y pertenencia a grupo criminal que reconocieron formar parte de una red dedicada al tráfico de cocaína y marihuana en el Segrià y en L’Hospitalet de Llobregat, en Barcelona. Los acusados reconocieron los hechos en la vista y aceptaron la pena pactada entre sus abogados y la Fiscalía, que rebajó las penas que pedía, que iban desde los tres a los 11 años de prisión, al aplicar las atenuantes de drogadicción y confesión. De esta forma, la Audiencia condenó de forma firme a diez de los acusados mientras que absolvió a otro después de que el Ministerio Público retirara los cargos.
La conformidad evitó la celebración del juicio, que estaba previsto que también continuara con una sesión hoy. Además de las penas de prisión, los condenados aceptaron el pago de multas de entre 6.000 y 90.000 euros cada uno. Entre los diez, deberán pagar un total de 489.000 euros.
Siete de los once procesados por esta causa, que instruyó el Juzgado 1 de Instrucción de Balaguer, se encontraba en prisión preventiva desde su arresto. Según ha quedado probado, al menos desde junio de 2019 y hasta mayo de 2020, la organización se dedicaba a adquirir grandes cantidades de cocaína en L’Hospitalet de Llobregat y la preparaban en pequeñas dosis más pequeñas para venderlas en municipios del Segrià y Barcelona. También se dedicaban al cultivo y tráfico de marihuana.
Los arrestos se registraron en Almacelles, Alfarràs, Lleida, Alpicat y L’Hospitalet y los agentes intervinieron cerca de 2,5 kilos de cocaína, una instalación ‘indoor’ con 43 plantas de marihuana, así como 88.000 euros en efectivo, cinco vehículos (uno de ellos con doble fondo para ocultar la droga) y utensilios para su manipulación. La investigación determinó que la red distribuía sustancias estupefacientes a otras localidades próximas, así como a otras de la provincia de Huesca como Altorricó, Binéfar, Fraga, Monzón y Saidí. En total, se localizaron diez puntos de venta, dos de ellos en el Segrià.
El de cocaína estaba en Almacelles y el de marihuana, en Alfarràs.